Plan geotérmico generará 2.500 empleos
| Miércoles 30 julio, 2014
Se requerirán calles de acceso, plantas y ductos
Plan geotérmico generará 2.500 empleos
Tres proyectos energéticos se realizarán en la próxima década
Se generarán hasta 2.500 puestos de trabajo, así como oportunidades para las empresas proveedoras de materiales mediante el desarrollo de tres plantas geotérmicas en la zona del Rincón de la Vieja, por realizarse durante la próxima década con una inversión total de hasta $1 mil millones.
Miravalles es una de las plantas actuales geotérmicas del ICE. Marco Monge/La República
Se trata de una iniciativa del ICE, que realizará gran parte de los proyectos, aprovechando sus propios equipos y mano de obra.Por otro lado, la capacidad del ICE es limitada, así que subcontrataría otras partes significativas para las plantas Pailas II, que iniciaría operaciones en cinco años. Por otra parte Borinquen I y II están programadas para operar en no más de diez años.
Cada una de las plantas contaría con una capacidad de 55 megavatios, así que en total abastecerían a más de 100 mil hogares.
Es posible que no sigan adelante los proyectos, al no encontrar las fuentes viables de energía bajo la superficie de la tierra.
Sin embargo, es probable que prosperen, dado que esa zona está cerca de las fuentes de calor, de la actividad volcánica subterránea, que producen el vapor necesario para impulsar las turbinas.
Costa Rica por cierto ya tiene dos proyectos geotérmicos exitosos, sobre todo la planta Pailas, que desde 2011 cuenta con una capacidad de 35 megavatios de potencia eléctrica.
El plan de ampliar la capacidad geotérmica fue aprobado en principio la semana antepasada por la Asamblea, aprovechando un préstamo japonés en condiciones atractivas.
Entre las virtudes de la generación geotérmica está el hecho de que es limpia, aprovechando el calor de la propia tierra, para transformar el agua en vapor, a cambio de la térmica, que contamina con la quema de combustible fósiles.
El vapor extraído de la tierra incluye una mezcla de gases, principalmente dióxido de carbono, sulfuro de hidrógeno, metano y amoníaco, que contribuyen al calentamiento global, además puede contener pequeñas cantidades de elementos tóxicos, como mercurio, arsénico y boro.
Pero la cantidad total de gas de una operación geotérmica es una fracción de la emitida por una planta, que quema búnker o diesel, mientras una planta geotérmica moderna devuelve los productos químicos a la tierra, a través de los tubos de descarga.
Es además confiable, al estar disponible todo el año, a diferencia de la energía hidroeléctrica, que a menudo no se ofrece en el verano, así como de la eólica, que sirve únicamente cuando sople el viento.
En lo que al precio al consumidor se refiere, las plantas geotérmicas a nivel mundial suelen costar entre $3 millones y $6 millones por megavatio, dependiendo de lo difícil que puede ser encontrar el vapor subterráneo.
En este caso, el costo de 165 megavatios en Costa Rica variaría de $500 millones hasta $1 mil millones, una diferencia significativa.
Sería cuestión de que el ICE mantenga un control efectivo de los costos de los proyectos, lo cual sigue siendo una duda.
Tampoco hubo competencia para definir quién iba a realizar el proyecto, de hecho solo el ICE podría hacerlo, dado el tope en el derecho de las empresas privadas en generar la fuerza eléctrica.
Por su parte, el costo del dinero para los nuevos proyectos sería bajo, sobre todo gracias a la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional, la principal contribuyente al préstamo, que se cancelaría a un plazo de 40 años, con una tasa de interés fija de tan solo el 0,6%, y un periodo de gracia de diez años.
Las plantas existentes de Miravalles y Pailas I cuentan con una capacidad en conjunta de 190 megavatios, del total actual de 2.700.
Redacción
redaccion@larepublica.net
@La_Republica