País transfiere riqueza al exterior
Carolina Acuña cacuna@larepublica.net | Lunes 24 diciembre, 2012
Inversionistas foráneos atraídos por altas tasas en colones
País transfiere riqueza al exterior
Costa Rica “subsidia” $82 millones, por cada $1 mil millones que ingresan como inversión de corto plazo
Mientras hay entidades públicas con necesidades que se cubrirían con poco dinero; en un año, el país podría estar transfiriendo $82 millones a extranjeros que invierten en bonos locales.
“En Costa Rica el diferencial de tasas puede ser de un 9% contra un 1% afuera”, dijo Rodrigo Bolaños, presidente del Banco Central de Costa Rica. “Esto nos preocupa dado que estos flujos que ingresan son perjudiciales, porque son muy volátiles”, añadió.
Los capitales de corto plazo están ingresando más fuertemente desde setiembre, debido al uso de instrumentos nuevos de inversión (para Costa Rica) como los Global Depositary Notes (GDN).
Los GDN son como “reflejos en el espejo” de los bonos ticos (igualan el plazo y tasa de interés pero pueden transarse en el exterior al ser pagaderas en dólares). La emisión de estos GDN fue motivada por la labor de promoción internacional, previa a la colocación de deuda externa, la cual elevó la imagen del país, aumentó la cantidad de “papel costarricense en circulación” y por ende hizo atractiva la emisión de instrumentos derivados de la deuda interna nacional.
El problema, además de la transferencia de riqueza que se está efectuando, es la entrada masiva de dólares que distorsiona las relaciones entre variables macroeconómicas en una economía pequeña como la nuestra. Los excesos de dólares presionan al Central a comprar divisas emitiendo colones, lo que dificulta el control de la inflación. El Central para cumplir con sus objetivos debe recurrir a subastas de títulos para recoger esos colones y evitar el alza en la inflación. Pero el costo es una presión al alza a las tasas de interés, lo que al final de cuentas es la motivación de la entrada de capitales, por lo que se repite el círculo vicioso.
Para controlar este problema se podrían tomar medidas de control de capitales como encajes o impuestos, pero para que se apliquen a esos flujos que ingresan por medio de puestos de bolsa hay que cambiar la ley.
Lo más sensato es reducir el déficit fiscal, que es el detonante del endeudamiento. Si no, el país entero puede ser blanco de un ataque al piso de la banda cambiaria por ingresos excesivos de dólares, que con cualquier movimiento del tipo de cambio genere una sobrerreacción de los inversores, y una salida desordenada de los capitales que ingresaron creando un caos en el sector financiero, que afectaría no solo a las entidades sino a quienes tienen inversiones y eso también incluye a quienes tienen su dinero en las operadoras de pensiones.
Ciertamente, no son simples los dilemas que enfrentará el Banco Central en 2013.
Algo que puede ser muy preocupante es que por la novedad del uso de la figura con deuda doméstica costarricense, puede que estemos al inicio de un crecimiento aún mucho mayor de los ingresos de capital en las próximas semanas y meses.
Carolina Acuña
cacuna@larepublica.net