Ahorre para convertirse en inversionista
Ahorre para convertirse en inversionista
Ahorrar es un tema que se aprende en el camino. Dichoso usted si no le tocó hacerlo porque sus padres u autoridades se lo inculcaron desde pequeño, pero para el costarricense en términos generales esto es algo que se aprende hasta cuando se sufre un poco en términos de dinero.
Vivimos en una sociedad de mucho consumo, donde nos irradian desde los medios de comunicación o sociedad para gastar dinero, lo que cada vez hace más mala palabra ahorrar.
Me ha pasado a mí y me imagino que a muchos de ustedes, que antes de ahorrar el primer colón, debían hasta el alma, pedían dinero por todos lados o simplemente solo gastaban y gastaban.
El primer paso para ahorrar es olvidarse de una parte del salario, mesada o dinero que se perciba, y destinarlo a un ahorro automático, ya sea en una entidad financiera, con la asociación solidarista o cooperativa de su trabajo.
Inicie con el 10%, luego cuando el hábito sea constante llegue al 20% y en solo un año de hacerlo, ya verá resultados.
Pero no se quede solo en el ahorro, guardar es bueno, pero gana pocos o nada de intereses, mientras que invertir, y aprender a hacerlo, lo hace todo un estratega en el juego de las finanzas.
Para eso existen muchos instrumentos, como los certificados de depósito a plazo, o comprar participaciones en fondos de mercado de dinero que es más sofisticado, pero lo importante es que ganará más.
Además de que luego puede capitalizar las ganancias de esas inversiones, juntarlo con lo que está ahorrando —porque eso debe ser continuo— y cada vez, como dirían los abuelos, tener una “buchaquita” más grande.
Incluso, puede pensar también en un plan voluntario de pensión, el cual le ayudará a tener un buen retiro, con suficiencia patrimonial cuando usted quiera olvidarse de trabajar.
El camino es largo, pero conforme vea su cuenta engordando, usted será cada día un mejor ahorrante y un verdadero inversionista.
Fabio Parreaguirre
fparreaguirre@larepublica.net
@fabiopLR