Automotrices alemanas aceleran plan eléctrico sin dejar diésel
Bloomberg | Miércoles 13 septiembre, 2017
Las automotrices alemanas presentarán en el Salón Internacional del Automóvil de Fráncfort sus planes para electrificar gran parte, si no toda su cartera, de modelos. El problema es que esa transformación va a llevar más de una década y entretanto necesitan el diésel para cumplir con normas más estrictas sobre emisiones en Europa.
Por lo tanto, han tenido que adelantar una estrategia doble que plantea invertir miles de millones de dólares para producir cientos de modelos eléctricos y a la vez defender su tecnología diésel como una alternativa más limpia a los motores a gasolina por el momento. No obstante, la renovación es urgente, ya que China, el mayor mercado automotor del mundo, se sumó durante el fin de semana a Francia y el Reino Unido en anunciar planes para eliminar gradualmente los vehículos impulsados por combustibles fósiles.
“Los mecanismos de transmisión convencionales y alternativos no son enemigos, ganamos el dinero que necesitamos para invertir miles de millones en el futuro con los vehículos que vendemos hoy. Y sin motores diésel eficientes y limpios, las metas climáticas no serán factibles”, dijo Matthias Müeller, máximo ejecutivo de Volkswagen.
Lea más: Autos eléctricos podrían afectar seriamente el mercado petrolero
Las automotrices alemanas están bajo una presión particular para presentar un enfoque nuevo respecto de los desafíos que enfrenta la industria dado que dependen más que otros del diésel como forma de reducir las emisiones en sus autos más grandes. El escándalo de la manipulación de las pruebas de emisiones por parte de VW y la preocupación por la contaminación en áreas urbanas también han provocado en Alemania una crisis que llevó a que este verano boreal se realizaran dos cumbres nacionales sobre el diésel con la presencia de dirigentes políticos, incluida una con la canciller Angela Merkel.
Müeller anunció planes para fabricar versiones eléctricas de los 300 modelos de las 12 marcas del grupo —cambio que llevará hasta 2030 y ocasionará costos de desarrollo que llegarán a los 20 mil millones de euros ($24 mil millones).
Los planes de Volkswagen son los más ambiciosos de la industria automotriz y reflejan los esfuerzos de la compañía para recuperarse de su manipulación de 11 millones de vehículos diésel con el fin de que dieran resultados engañosos en las pruebas de emisiones. El escándalo provocó una reacción que ha llevado a los consumidores a rechazar esta tecnología por la preocupación sobre la contaminación y prohibiciones de conducción municipales.
Lea más: Ola de coches eléctricos impulsará mercado del níquel
Además de los costos para desarrollar los nuevos modelos, las automotrices alemanas tendrán que vérselas con márgenes más débiles para sus vehículos eléctricos que los que están acostumbradas a obtener con sus modelos diésel. Daimler recortará 4 mil millones de euros de gastos para 2025 previendo la menor rentabilidad que vislumbra tener inicialmente con los autos eléctricos.
En Fráncfort, la marca Mercedes-Benz de Daimler presentó un auto eléctrico de cinco puertas, parte de un proyecto para lanzar diez vehículos eléctricos para 2022. Además de la nueva línea EQ de vehículos a batería, el fabricante sumará variantes eléctricas de toda su gama de modelos, incluidos los llamados híbridos leves con una batería más pequeña que no requiere un enchufe para cargarse.