Brasil soportará la mayor parte del excedente mundial de azúcar
Bloomberg | Jueves 17 agosto, 2017
Es un mal momento para ser el principal exportador mundial de azúcar.
Brasil —que representa casi la mitad de todos los envíos— enfrenta un superávit mundial y una mayor competencia para obtener compradores. Los precios se encaminan a su peor comienzo de año desde la década de 1980. Complica el problema una producción récord de azúcar que está creciendo más de lo pronosticado en la principal región productora brasileña, en tanto disminuye el consumo mundial y la gente usa otros edulcorantes.
Después de que unos suministros ajustados desataron un auge de los futuros del azúcar en 2016, la producción global se disparará un 5,2% a un máximo de todos los tiempos en el año que termina en abril, predice el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA). Brasil podría tener problemas para encontrar compradores para su azúcar en bruto antes de un aumento de las exportaciones de la Unión Europea, que pondrá fin a las restricciones de los cultivos y los límites de los envíos fuera del bloque comercial a partir de octubre.
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"No veo una fuerte demanda de azúcar después de setiembre con el peso del retorno de Europa, la percepción de un superávit aumenta desde el cuarto trimestre", dijo Pedro Mamoru Mizutani, operador del grupo Czarnikow en São Paulo.
La producción mundial alcanzará un récord de 179,6 millones de toneladas esta temporada, según estimaciones del USDA. En la región de mayor crecimiento de Brasil, el centro-sur del país, la producción probablemente llegue a 36,4 millones de toneladas, o 900 mil más de lo esperado anteriormente a principios de año, según el investigador Green Pool Commodity Specialist.
Después de dos años consecutivos de déficit azucarero, el mundo podría ver un superávit de aproximadamente 6 millones de toneladas en la temporada 2017-18, estima Green Pool. Tropical Research Services calcula un excedente de 4 millones, mientras que el pronóstico inicial de la Organización Internacional del Azúcar en mayo fue de un superávit de 3 millones.
Los precios del azúcar se han desplomado un 33% desde finales de 2016, en ICE Futures U.S. en Nueva York.
Es el mayor descenso de un inicio de año desde 1984. El problema de Brasil son los productores de remolacha de la UE, que están ampliando la producción y las ventas después de una década de restricciones. Eso podría impulsar las ventas de azúcar refinado en el exterior del bloque en 2 millones a 3 millones de toneladas en la temporada que comienza el 1° de de octubre, según los analistas. Y puede perjudicar los márgenes de los refinadores en Oriente Medio y África del Norte, que podrían no importar tanta azúcar en bruto de Brasil.
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Ya hay signos de que el exceso afecta a los refinadores. El precio del azúcar blanco refinado en Londres bajó un 31%, a $363,10 la tonelada. La brecha entre el azúcar en bruto y refinada ha caído un 35%, a unos $75 la tonelada. Para los futuros de marzo, el diferencial es de US$70. Muchos de los principales refinadores del mundo necesitan por lo menos $100 para obtener un beneficio.
Brasil también está viendo menos ventas a uno de sus principales compradores, China. Los envíos brasileños al país más poblado del mundo y el segundo mayor consumidor de azúcar bajaron un 80% en el primer semestre de este año, después de que China aumentó los aranceles de importación en el segundo trimestre.