Quienes soportan los actuales procedimientos que, en la mayoría de los casos, nos roban tiempo y recursos, lo hacen porque están decididos a seguir adelante a cualquier precio. Pero esos no son todos

---

Busquemos esquemas modernos

Un valioso capital que podría utilizarse para producir más y mejorar en todos los sentidos, es el tiempo y energía que se malgasta en Costa Rica haciendo trámites, ventanilla tras ventanilla, papel tras papel, en las instituciones públicas, incluidos los bancos.
Esto, que es verdad de Perogrullo, debe cambiar porque no podemos ser competitivos como país si no lo hacemos. Hasta ahora los gobiernos han pospuesto el asunto, en general, como si no tuviera importancia.
Sin embargo, las propias instituciones una vez que se hayan vuelto eficientes en este aspecto contarán también con muchos más recursos humanos y tiempo para sus proyectos y su operación misma.
Ahora, Luis Carlos Delgado, el nuevo presidente del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero, anuncia que meterá manos en el tema y él cuenta con la experiencia para hacerlo si su decisión es firme.
Entre los aspectos que Delgado entrará a revisar para operar el cambio están los macroeconómicos, pero quizás sea importante puntualizar algunos otros pilares sobre los que sostendrá asimismo su labor, porque vemos en ellos, con total claridad, cómo nos afectan en nuestro día a día.
“Quisiera que las personas que están en la industria bancaria sean evaluadas. No se vale que se siente uno frente a un asesor y que este lo asesore mal, por esto creo que presionaré para que esa revisión sea recurrente y rigurosa”, le ha dicho a La República.
También asegura que tomará otras medidas y todo ello nos trae alguna esperanza. ¿Llegará finalmente el momento en que nos acerquemos a una ventanilla bancaria y con solo mostrar nuestra cédula de identidad aparezcan todos nuestros datos porque ya los hemos proporcionado en algún momento a alguno de los bancos del sistema?
Ha manifestado Delgado que revisará diversos manejos e invitará a especialistas extranjeros para ver como hacen las cosas en países desarrollados.
Tener un sistema financiero seguro e instituciones brindando buenos servicios, no debe ser sinónimo de despliegue de una tramitomanía tal que desanime a cualquiera.
El sistema debe utilizar las modernas herramientas para que estas funcionen realmente al servicio de los usuarios.
Quienes soportan los actuales procedimientos que, en la mayoría de los casos, nos roban tiempo y recursos, lo hacen porque están decididos a seguir adelante a cualquier precio. Pero esos no son todos.