Catalanes influyentes exigen desobediencia para negociar con España
Bloomberg | Viernes 25 septiembre, 2015
Catalanes influyentes exigen desobediencia para negociar con España
La Candidatura de Unidad Popular (CUP), un partido anticapitalista que podría ser clave para el próximo parlamento catalán, exhortará a los separatistas a emplear la desobediencia civil como parte de una estrategia para obligar al gobierno español a negociar los términos de la independencia de la región.
La principal plataforma separatista de Cataluña quizá necesite el apoyo del CUP, como se conoce al partido, para formar una mayoría favorable a la independencia después de la elección regional del domingo.
Si esto ocurriera, planteará un dilema al presidente regional Artur Mas.
No sólo el CUP prometió no apoyar la reelección de Mas como líder de la economía regional más grande de España, sino que la antipatía natural del grupo hacia la clase empresarial catalana de la que Mas obtiene gran parte de su apoyo dificultaría acordar un marco para un nuevo estado.
“En temas como los impuestos, podríamos proponer desobedecer las leyes españolas para comenzar, en cambio, a seguir normas acordadas a nivel catalán”, dijo Josep Manel Busqueta, economista de formación que se presenta como candidato por el CUP.
Mas y su principal aliado separatista, Oriol Junqueras, quieren utilizar una mayoría en la asamblea regional para sentar a los funcionarios del gobierno central en Madrid en la mesa de negociaciones con miras a completar la secesión en un plazo de 18 meses.
Una encuesta publicada por la emisora radial Cadena Ser el lunes mostró que la alianza de Mas y Junqueras obtendrá 65 escaños, faltándole tres para una mayoría en el parlamento de 135 bancas. El CUP ganará por lo menos nueve escaños, según las proyecciones.
La Asamblea Nacional Catalana, un grupo cívico que ha llevado cientos de miles de manifestantes a las calles de Barcelona en septiembre los cuatro últimos años, también considera que la desobediencia civil es parte del proceso de secesión.
Mariano Rajoy, primer ministro español, pone trabas a los nacionalistas catalanes, diciendo que sus exigencias son ilegales.
Rajoy tiene mayoría en ambas cámaras y la constitución fue modificada por última vez en 2011 cuando Rajoy, que en entonces era el líder de la oposición, dio apoyo a su predecesor, José Luis Rodríguez Zapatero, para incluir restricciones en el déficit fiscal del país en momentos en que la administración se debatía por evitar un rescate.
“Si el Estado no respeta el mandato democrático se llegaría a un impase que crearía inestabilidades muy grandes para el Estado español” dijo Busqueta, que fue asesor del gobierno de Hugo Chávez en Venezuela en 2004.
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