Código Verde: ¡Silencio! ¡Basura sónica!
Luis Diego Coronado laguilar@larepublica.net | Viernes 01 junio, 2012
¡Silencio! ¡Basura sónica!
Una de las zonas más ruidosas de San José es la vía que pasa frente al Hospital San Juan de Dios
La contaminación sónica proviene de mecanismos capaces, por sus vibraciones, de generar ondas que pueden ocasionar daños a las personas.
San José es de las zonas más contaminadas en este aspecto, según pasadas investigaciones, siendo San Pedro uno de los lugares con más volumen de decibeles considerados severos (mayor a 75), así como el circuito hospitalario y el centro, según la página acusticacr.com.
Significativo se considera entre 65 y 75 decibeles y moderado entre 55 y 65 decibeles.
“Consulté las denuncias en la Defensoría de los Habitantes y es una situación que sube y baja; en 2009 había menos, pero después de ese año empezaron a subir a un nivel más alto que en el de los diez años anteriores. Durante el periodo en el que María Luisa Avila fue ministra, bajaron las quejas, pues se compraron dispositivos de vigilancia y medición para estudiar los niveles de ruido”, declaró José Araya, presidente del Colegio de Físicos e investigador de este tema en la Universidad de Costa Rica.
Para conocer y controlar el nivel de contaminación sónica que se genera actualmente en el Area Metropolitana, la Municipalidad de San José y la Universidad Nacional realizan una investigación.
“Estamos ejecutando un estudio en los cuatro distritos principales de la ciudad, en lapsos de dos horas por punto, donde nos interesa medir lugares cercanos en los que debe haber tranquilidad, como hospitales, instituciones educativas y parques”, dijo Delia Guevara, jefa del departamento de Gestión Ambiental de la Municipalidad.
Los muestreos se realizan por medio de sonómetros y los métodos de medición están aprobados bajo parámetros internacionales.
Pese a que aún no se conocen los resultados, ya que el estudio no ha llegado a su fin, los primeros que se arrojan es que una de las zonas más ruidosas de San José es la vía que pasa frente al Hospital San Juan de Dios, ya que esta tiende a ser una calle con excesivo tráfico.
La contaminación sónica ocasiona enfermedades mentales y de estrés, de ahí la necesidad de que las regulaciones se apliquen cerca de lugares sensibles.
“Puede traer consecuencias físicas y psicológicas si es sostenido, es decir, si usted vive en un sitio donde todo el día pasan pitando, no puede dormir porque lo sobresaltan, y eso trae consecuencias”, explicó Rafael Milano, psiquiatra del Colegio de Médicos de Costa Rica.
Lo más importante es que los resultados sean aplicados por instituciones como el Ministerio de Obras Públicas y Transportes, que debería regular el tránsito.
“Por ejemplo, las paradas de buses no deben estar cerca de clínicas ni escuelas”, aseveró Guevara.
Cabe resaltar, que el mayor ruido en San José es causado por los motores pero sobre todo por los choferes que aceleran en zonas prohibidas o hacen sonar sus bocinas.
Luis Diego Coronado
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