Con las manos vacías
Cristian Williams cwilliams@larepublica.net | Sábado 29 octubre, 2011
Con las manos vacías
Costa Rica perdió la medalla de bronce ante Uruguay
El esfuerzo no alcanzó, se intentó pero no se pudo, la medalla de bronce, última esperanza de la selección de fútbol se fue, tras perder luchando 2-1 ante Uruguay.
Los errores una vez más pasaron una alta factura, sin dejar de lado que los suramericanos mostraron más hambre de triunfo, sobre todo en la primera parte, que de no ser por la excelente actuación, una vez más, de Kevin Briceño, se hubiesen adelantado en el marcador.
La mejor figura ofensiva de los charrúas sin duda fue su atacante Matías Britos, quien lo intentó por todos los medios, con remates de media y larga distancia, que llevaban sello de gol.
La nacional en la inicial gozó de una clara alternativa y fue en piernas de Gualberto Montenegro, quien se encontró solitario la pelota en el corazón del área y remató desviado.
En la complementaria, de nuevo llegó un gol de camerino, bien feo por cierto, pero que con apenas tres minutos le permitió a Uruguay ponerse 1-0, gracias al toque de su defensor Gastón Silva, quien se fue adelante y marcó.
La estrategia de Carlos Watson se vino abajo, el equipo volvió a naufragar en la consistencia de juego y llegaron los peores minutos, cuando se perdió toda idea de juego.
El castigo fue duro, ya que un autogol de Gualberto Montenegro, fallando en la comunicación con el portero Briceño, al min. 61, decretó el 2-0, que tenía sello lapidario.
Los minutos pasaban, Uruguay controlaba las acciones sin mayores inconvenientes, jugaba con el tiempo, mientras que Costa Rica no daba señales de vida.
Pero se dio una reacción, apretaron la marca, adelantaron líneas y en un ataque, el defensor Emiliano Albín tocó la pelota con la mano dentro del área y se decretó el penal.
Con diez minutos por jugar llegó Jonathan McDonald para marcar el 2-1 y ponerle emoción al cierre, con dominio nacional, que por más que se intentó, no logró la igualada y se fue la medalla de bronce al sur
.
Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net
Costa Rica perdió la medalla de bronce ante Uruguay
Los errores una vez más pasaron una alta factura, sin dejar de lado que los suramericanos mostraron más hambre de triunfo, sobre todo en la primera parte, que de no ser por la excelente actuación, una vez más, de Kevin Briceño, se hubiesen adelantado en el marcador.
La mejor figura ofensiva de los charrúas sin duda fue su atacante Matías Britos, quien lo intentó por todos los medios, con remates de media y larga distancia, que llevaban sello de gol.
La nacional en la inicial gozó de una clara alternativa y fue en piernas de Gualberto Montenegro, quien se encontró solitario la pelota en el corazón del área y remató desviado.
En la complementaria, de nuevo llegó un gol de camerino, bien feo por cierto, pero que con apenas tres minutos le permitió a Uruguay ponerse 1-0, gracias al toque de su defensor Gastón Silva, quien se fue adelante y marcó.
La estrategia de Carlos Watson se vino abajo, el equipo volvió a naufragar en la consistencia de juego y llegaron los peores minutos, cuando se perdió toda idea de juego.
El castigo fue duro, ya que un autogol de Gualberto Montenegro, fallando en la comunicación con el portero Briceño, al min. 61, decretó el 2-0, que tenía sello lapidario.
Los minutos pasaban, Uruguay controlaba las acciones sin mayores inconvenientes, jugaba con el tiempo, mientras que Costa Rica no daba señales de vida.
Pero se dio una reacción, apretaron la marca, adelantaron líneas y en un ataque, el defensor Emiliano Albín tocó la pelota con la mano dentro del área y se decretó el penal.
Con diez minutos por jugar llegó Jonathan McDonald para marcar el 2-1 y ponerle emoción al cierre, con dominio nacional, que por más que se intentó, no logró la igualada y se fue la medalla de bronce al sur
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Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net