Cuenta corriente con primer superávit desde 1999
Wilmer Murillo wmurillo@larepublica.net | Miércoles 01 julio, 2009
Cuenta corriente con primer superávit desde 1999
La brecha entre las importaciones y las exportaciones de bienes y servicios (el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos) se redujo el primer trimestre de este año.
En el periodo se logró un superávit de $29,8 millones, el cual no se daba desde 1999, de acuerdo con el último dato disponible en la página web del Banco Central.
Las cifras de la balanza de pagos arrojan el dato favorable atribuido a la cuenta de servicios.
La balanza en servicios registró un superávit de $602 millones. Eso permitió que la cuenta corriente lograra un resultado positivo.
La cuenta corriente no solo toma en cuenta las exportaciones e importaciones de bienes y servicios sino también los movimientos de renta y otras transferencias.
En la parte de bienes, las importaciones continúan superando el saldo de las exportaciones por lo que el déficit comercial se mantiene en $347,8 millones. Sin embargo, es mucho menor al presentado en los trimestres anteriores debido a la caída tan importante de las importaciones.
Desde el segundo trimestre de 2004 no se presentaba un déficit similar, dijo Mariany Espinoza, analista de INS Valores.
En el primer trimestre del 2008 la cuenta corriente más bien cerró con un déficit de $461 millones.
Producto de la contracción de la demanda interna y la rebaja en el precio de algunas materias primas, del petróleo principalmente, las importaciones presentaron una caída en los primeros tres meses del año.
Asimismo, en el reporte del Banco Central se puede observar que entre enero y marzo pasados el país recibió $286 millones en inversión extranjera directa, cifra que representa una caída del 18% con respecto al primer trimestre del año pasado. Este menor ingreso de inversión responde a la desaceleración de la economía internacional.
Las importaciones han caído de manera significativa (33,6% en términos interanuales) en la primera mitad del año, y se espera que esta tendencia se mantenga por algún tiempo más. Lo anterior provoca una menor demanda de divisas.
Wilmer Murillo
wmurillo@larepublica.net
La brecha entre las importaciones y las exportaciones de bienes y servicios (el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos) se redujo el primer trimestre de este año.
En el periodo se logró un superávit de $29,8 millones, el cual no se daba desde 1999, de acuerdo con el último dato disponible en la página web del Banco Central.
Las cifras de la balanza de pagos arrojan el dato favorable atribuido a la cuenta de servicios.
La balanza en servicios registró un superávit de $602 millones. Eso permitió que la cuenta corriente lograra un resultado positivo.
La cuenta corriente no solo toma en cuenta las exportaciones e importaciones de bienes y servicios sino también los movimientos de renta y otras transferencias.
En la parte de bienes, las importaciones continúan superando el saldo de las exportaciones por lo que el déficit comercial se mantiene en $347,8 millones. Sin embargo, es mucho menor al presentado en los trimestres anteriores debido a la caída tan importante de las importaciones.
Desde el segundo trimestre de 2004 no se presentaba un déficit similar, dijo Mariany Espinoza, analista de INS Valores.
En el primer trimestre del 2008 la cuenta corriente más bien cerró con un déficit de $461 millones.
Producto de la contracción de la demanda interna y la rebaja en el precio de algunas materias primas, del petróleo principalmente, las importaciones presentaron una caída en los primeros tres meses del año.
Asimismo, en el reporte del Banco Central se puede observar que entre enero y marzo pasados el país recibió $286 millones en inversión extranjera directa, cifra que representa una caída del 18% con respecto al primer trimestre del año pasado. Este menor ingreso de inversión responde a la desaceleración de la economía internacional.
Las importaciones han caído de manera significativa (33,6% en términos interanuales) en la primera mitad del año, y se espera que esta tendencia se mantenga por algún tiempo más. Lo anterior provoca una menor demanda de divisas.
Wilmer Murillo
wmurillo@larepublica.net