Desempleo costarricense es el más crítico en el ámbito de la OCDE

Costa Rica está en el primer lugar en dos indicadores mundiales que lejos de generar orgullo más bien producen preocupación

No solo posee la tasa más alta de desempleo general, sino que también es donde hay menos oportunidad de trabajo para los jóvenes, entre los 38 países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

En cuanto al desempleo en general, la tasa nacional es del 17,7%, según el corte a mayo, lo que casi triplica el promedio de la OCDE, que es de un 6,6%.

Esta situación ha preocupado a organismos internacionales, entre ellos la propia OCDE, las cuales se han dado a la tarea de sugerir algunas medidas para tratar de revertir estos índices.

Entre esas medidas destaca definir una estrategia para reducir la informalidad, mediante la simplificación del salario mínimo y de los procedimientos administrativos que encarecen los costos de formalización.

En esa misma línea, instan a buscar otras fuentes de financiamiento para la seguridad social de manera que no impacte tan fuerte en los costos de producción de empresas y emprendedores, así como mejorar la calidad de educación y de la capacitación.

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“El desempleo es alto y no se espera que los puestos de trabajo se recuperen rápidamente. Alcanzar las tasas de empleo prepandémicas puede llevar varios años", afirmó la OCDE en el último estudio realizado.

En el caso del desempleo juvenil, la tasa alcanza el 40%, todavía peor si se considera que un cuarto de los jóvenes del país no estudia ni trabaja.

Si bien la pandemia empeoró la situación, los índices previos manifestaban una tendencia negativa y prueba es que en febrero de 2020 la tasa de desempleo en personas entre los 15 y 24 años era de un 30%, la segunda más alta por detrás de la griega.

La alerta de la OCDE hacia el país es aún mayor pues no identificó que se estén promoviendo medidas en apoyo a los jóvenes como sí lo están haciendo otras naciones que pertenecen a la organización.

Por ejemplo, en 28 de los países ampliaron los subsidios existentes referentes a la contratación o introdujeron apoyos en respuesta a la crisis de Covid-19, y de esos, 12 utilizan estas medidas para apoyar el empleo de jóvenes que buscan insertarse en el mercado laboral.

Uno de ellos es Estonia, que implementó desde 2018 el Sistema de Apoyo a la Garantía Juvenil, una herramienta para que los municipios lleguen a los jóvenes que no están en la educación, empleo o capacitación y los apoyen para continuar su educación y para integrarlos en el mercado laboral.

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El deterioro en la condición del mercado laboral es notorio; hace cinco años, en el mismo tipo de estudio, Costa Rica estaba en el séptimo lugar de países con desempleo más alto entre países OCDE.

En ese momento se tenía una tasa del 9,5%, mejor ubicado que Francia (10,1%), Eslovaquia (10,4%), Italia (11,6%), Portugal (12%) España (20,4%) y Grecia (24,2%).