El vampiro petrolero del ICE le teme a la luz del sol
Ricardo Trujillo gerencia@fibrotel.cr | Martes 17 octubre, 2023
Ricardo Trujillo Molina MScEE
gerencia@fibrotel.cr
La única manera de entender la razón por la cual el ICE no aprovecha la energía solar gratis que nuestro territorio nacional recibe todos los días del año y seguirá recibiendo por varios millones de años más, es considerar a dicho ente, a sus jerarcas y mandos del sector energía, como la reencarnación del mismísimo Vlad el empalador ó Vlad Dracul, mito que fue llevado a rango de novela por el inglés Bram Stocker. Vlad fue un rey de la antigua Valaquia, hoy una región de Rumania, que bebía la sangre de sus enemigos, y que en la novela Drácula, se lo describe como un ser muerto en vida que se transforma en vampiro durante las noches y que reposa en un ataúd durante el día, pues le teme a la luz solar porque con ella se quema y se evapora.
Rechazo del ICE a la generación fotoeléctrica
Tal parece que el ICE también le teme al bajo costo que significa aprovechar la luz solar para generar electricidad con la actual tecnología fotovoltaica, pues prefiere seguir utilizando combustibles importados derivados del petróleo en cada vez mas altas potencias. Los ingenieros y jerarcas del ICE conocen a la perfección que el costo nivelado de la energía solar ya es del orden de los 2 a 5 centavos de dólar por kilovatio hora, mientras que el costo de la generación térmica con bunker o UFO es de por lo menos 15 centavos de dólar por kilovatio hora y en franco ascenso a medida sube el precio del petróleo. Los datos anteriores están disponibles en todos los libros, estudios, publicaciones y reportes mundiales sobres las tecnologías de generación eléctrica. Es por lo anterior que el planeta entero con la sola excepción de Costa Rica se enrumba hacia una mayor generación renovable fotovoltaica en sustitución de las anteriores y clásicas tecnologías térmicas, geotérmicas, eólicas e hidroeléctricas.
Critica situación del SEN
La situación energética que enfrentamos en el país es sumamente seria por no referirnos a ella todavía como trágica.
El ICE ha dejado hasta de operar la única planta de un megavatio de potencia de generación eléctrica con el recurso solar, la de Miravalles que fue donada por el gobierno del Japón hace 10 años. Simplemente desapareció de los más recientes reportes diarios del despacho de energía que publica el DOCSIS del ICE. Tampoco aparecen en estos momentos como importantes generadores las plantas privadas de bagazo de caña, las plantas eólicas, y la generación geotérmica monopólica del ICE, está reducida a su más mínima producción, apenas 200 megavatios de potencia en operación, de los mas de 500 megavatios nominales de potencia de todas esas plantas en los que se han invertido miles de millones de dólares. Sin embargo, las plantas térmicas operan a su máxima potencia de casi 250 Megavatios en horas diurnas y la importación de energía del MER se mantiene en los 100 megavatios de potencia durante esas mismas horas diurnas. En resumen, las plantas de generación con recursos renovables a excepción de las hidroeléctricas, en estos meses de muy pocas precipitaciones lluviosas han prácticamente desaparecido de la matriz eléctrica. Algo que sabíamos que podría ocurrir pero que durante la administración anterior del ICE se evitó que se supiera a nivel presidencial ya no digamos a nivel de la ciudadanía. El único recurso renovable que abunda en el país, en especial en Nicoya durante todo el año en las horas diurnas es el solar, al que tanto le huye, le teme y lo desaprovecha el ICE. Y así se los hizo saber el BID en el estudio de la red publicado hace más de 7 años. Recomendaciones que el ICE paso por alto y prefirió no acatar.
La extrema ineficiencia operativa de las plantas eléctricas renovables del ICE en estos momentos es patética y preocupante. La planta sobre el rio reventazón opera en estos momentos a una máxima potencia de 130 MW cuando su potencia máxima de diseño es de 325 MW. Algo similar ocurre con las plantas del complejo ARDESA que con 98 MW de potencia generada al filo del mediodía solo representa un 22 % de su potencia de placa de 360 MW.
Situación inverosímil difícil de creer
¿Porque si Costa Rica se ha promovido a nivel mundial y durante varios años como un país líder en descarbonización y con una generación eléctrica con casi un 100% en base a recursos renovables, ahora en momentos de suma crisis climática, su institución más emblemática en generación eléctrica da un giro diametral en ese compromiso? Algo raro se cuece tras bambalinas, pues ya no creemos en vampiros humanos que beben sangre, pero si conocemos de sobre de ejemplos de cómo hacer pobres a los pueblos negándoles el aprovechamiento o robándoles sus propios recursos energéticos.
No es cierto que varias plantas térmicas en bloques de 40 MW sean de más rápida construcción y emplazamiento en nuestro territorio, que varias plantas solares de la misma potencia. ¿Porque el ICE suspendió el concurso de contratación de 160 MW de potencia solar y ahora corre para adjudicar 140 MW de potencia térmica? La cruda realidad que enfrentamos es sumamente difícil de aceptar y comprender por mas pretextos y excusas que provengan de la alta dirección del ICE.
El país merece una explicación mas seria que la que hasta la fecha han dado los jerarcas del ICE la cual se reduce a los siguientes párrafos que reproduzco a continuación:
El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) inició el proceso para contratar plantas térmicas de alquiler por el rezago en inversión que sufrió el parque de generación durante la Administración anterior. Esta previsión sumaría 150 megavatios para reforzar el respaldo a todo el Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
De forma paralela, el ICE:
• Promueve la apertura de bloques de energía solar y eólica para la construcción de nuevas plantas durante los próximos dos años. Para el avance de estas iniciativas, el ICE depende de que el Regulador defina los pasos a seguir.
• Habilitó la recepción de solicitudes de servicios para la interconexión de generación distribuida, basada en procedimientos temporales creados por el Instituto, a la espera de la definición de todos los elementos regulatorios.
La administración anterior del ICE se opuso al incremento de la potencia en plantas de generación eléctrica porque asumió que la demanda de energía eléctrica había disminuido con la pandemia y que llevaría varios anos volver a enfrentar un crecimiento en la demanda. Y al oponerse a su propia expansión, también se opuso férreamente a que fuese el sector privado el que invirtiese en dicha expansión a sabiendas que todo excedente energético es y será exportable al MER. El ICE obtuvo pírricas ganancias exportando sus excedentes durante la época lluviosa de los últimos tres años, lo que muchos consideran que fue un grave error, pues vendió a bajísimo precio el agua almacenada en las represas estacionales, y ahora careciendo de esa agua almacenada, está comprando la energía a 10 o hasta 20 veces el precio con el que vendió la energía en años anteriores. De esto puede dar fe el Ing. Salvador López, exdirector del CENCE. a quien la actual dirección le cortó el rabo sin dar muchas explicaciones, a finales del 2022.
En estos duros momentos de violencia extrema, reducida inversión extranjera, alto costo de la vida, desempleo rampante y deuda pública impagable, toda Costa Rica tiene que elevar su más enérgica protesta contra las arbitrariedades del ICE. No es con más uso de derivados del petróleo que vamos a reducir nuestra pobreza; todo lo contrario; es con el pleno uso y aprovechamiento de nuestros propios recursos energéticos que vamos a reducir las importaciones y a generar mayor valor agregado en nuestra producción. El ICE tiene que rectificar su pifia y craso error, y volver a la promoción de las energías renovables como la ruta para descarbonizar nuestra economía, reducir nuestra dependencia del petróleo, ayudar a la lucha contra el cambio climático y hasta contribuir a la salvación de la raza humana en este planeta.