Exejecutivo de Petrobras acusa a Alstom y GE de pagar sobornos
Bloomberg | Jueves 09 junio, 2016
Uno de los exejecutivos de mayor jerarquía en Petrobras ha dicho a los investigadores que Alstom SA y General Electric pagaron sobornos para obtener contratos hace más de una década, lo cual pone de relieve que el mayor escándalo por corrupción de Brasil continúa creciendo.
Néstor Cervero, que presidía la división internacional del productor petrolero estatal brasileño, dijo a los investigadores que recibió coimas por $700 mil de Alstom en una cuenta en Suiza a cambio de elegir a la compañía para proveer cuatro turbinas destinadas a proyectos de centrales eléctricas, según un testimonio dado a conocer por el Supremo Tribunal. También declaró ante los fiscales que tenía información de segunda mano de que GE también sobornó a un ejecutivo para obtener contratos por turbinas, según los documentos judiciales.
Alstom dijo en una respuesta por correo electrónico que el “sector de la energía ya no forma parte de nuestras actividades”, sin brindar más comentarios. GE dijo que no tenía conocimiento de ningún acto indebido en los contratos por las turbinas.
La investigación por corrupción que rodea a Petrobras, conocida como Operación Lavado de Autos, comenzó hace más de dos años cuando los investigadores descubrieron un enorme plan de pagos por ciertos privilegios mediante el cual un grupo de proveedores sobornó a ejecutivos del productor petrolero y a políticos para obtener contratos y limitar la competencia. El escándalo trajo aparejados los arrestos de importantes empresarios y políticos brasileños, y contribuyó a la suspensión de la presidenta Dilma Rousseff a la espera de su juicio político.
Cervero, que fue condenado el año pasado por delitos que incluyen corrupción y lavado de dinero, dijo que obtuvo la información de un socio de que Alstom y GE habían pagado $10 millones cada una en coimas al exsenador y exejecutivo de Petrobras, Delcidio Amaral. GE supuestamente pagó sobornos para obtener un contrato por 10 turbinas, según Cervero. Los presuntos sobornos tuvieron lugar durante el mandato de Fernando Henrique Cardoso expresidente, a fines de los años 1990, comienzos de los años 2000, dijo Cervero, sin especificar los años. Cardoso dejó la presidencia en 2002.
“GE no tiene conocimiento de ninguna irregularidad o acto indebido en los contratos mencionados”, y “no es la manera en que GE hace negocios”, dijo la empresa en una respuesta por correo electrónico. GE tiene elevadas normas de cumplimiento y está dispuesta a cooperar con las autoridades si es necesario, agregó la empresa.
El abogado de Amaral, Antonio Basto, no respondió en forma inmediata a una consulta.