Falla la Caja en hipotecas
Oscar Rodriguez orodriguez@larepublica.net | Jueves 09 agosto, 2012
Mora en préstamos de vivienda llegaría a nivel peligroso
Falla la Caja en hipotecas
Pérdida de $3 millones de pensiones de empresarios y trabajadores en 2011
Parte del dinero que usted cotiza como patrono o empleado a la Caja está invertido en un negocio, que está dejando pérdidas: los préstamos hipotecarios.
Esta fue una alternativa de ganar dinero y ayudarle al fondo de pensiones, para pagar a los trabajadores cuando llega el momento de su jubilación.
Sin embargo, el año pasado hubo $3 millones en préstamos incobrables, de gente que dejó de pagar, porque las cuotas aumentaron a un punto insostenible.
La morosidad fue del 2,8% de la cartera crediticia al cierre del año pasado, mientras que en la banca fue de un 1,3%.
Para que el negocio hipotecario siga siendo bueno, la morosidad no debe llegar al 3%.
El atraso en el pago de créditos comenzó a crecer desde octubre de 2010, cuando era del 2,4%, el doble que la tasa de la banca comercial.
Si la Caja estuviera sujeta a revisión financiera, como lo están los bancos, podría recibir una llamada de atención del supervisor estatal.
En este caso, son los jerarcas de la institución los que deben decidir cuáles acciones ejecutar para disminuir el riesgo que significa la morosidad.
El monto de los préstamos incobrables fue de $3 millones el año pasado, un 70% más que un año antes, cuando fue de poco más de $1,8 millones.
El deterioro crediticio en la Caja se debe en parte a que muchos de los préstamos se otorgaron a personas que no reunían las condiciones financieras, determinó un estudio de la institución.
Además, al inicio del año anterior aumentó en dos puntos porcentuales la tasa de interés hasta el 12%, mientras que varios bancos ofrecían préstamos hipotecarios por el orden del 9%.
La razón es que la Caja tiene sus créditos ajustados a la Tasa Básica Pasiva, y el alza de este índice encareció sus préstamos, mientras que los bancos tienen condiciones más favorables, como empréstitos a tasa fija.
La consecuencia de ambos factores fue que menos familias pudieron hacer frente al pago de su crédito.
Por ahora, los préstamos morosos y los incobrables están en proceso de cobro judicial, pero obtener el dinero o ejecutar el bien puesto en garantía es un proceso que tarda años.
Los recursos prestados por la Caja son parte de la cotización de cada trabajador, privado y público, para su pensión.
Así como el aporte que cada mes realizan empresarios.
A la fecha no se ha tomado ninguna acción para evitar un deterioro mayor al sufrido, denuncia la Contraloría.
Actualmente la institución tiene un total de 7 mil operaciones crediticias abiertas.
Junto a la pérdida de atractivo, la Caja tiene pocas opciones para competir contra las fuertes campañas hipotecarias de los bancos. Primero porque su oferta es más rígida y con nula posibilidad de realizar ofertas especiales en ferias de vivienda.
Además, el ente tiene un límite para la utilización de los recursos del régimen de pensiones que es el sustento de su cartera.
Mientras, los bancos tienen libertad para buscar recursos frescos sea en el mercado nacional o el extranjero. Así como ofrecer tasas de interés competitivas.
Para revitalizar el negocio hipotecario, la Caja aprobó una serie de medidas a finales de julio anterior.
Incorporó por primera vez la tasa fija de un 10% a sus nuevos créditos hasta por un periodo de tres años, aunque luego el préstamo estará ligado a la Tasa Básica Pasiva, con lo cual encarecería hasta un 14% a partir del cuarto año.
Asimismo amplió el monto máximo para prestar hasta los ¢100 millones y el plazo de los préstamos también subió hasta los 30 años.
Por último, la institución incrementó su meta de colocación hasta los ¢9,5 mil millones, mientras que el año anterior prestó ¢4 mil millones.
Sin embargo, está muy lejos de los ¢120 mil millones que el Banco Nacional se planteó como meta de colocación durante este año.
LA REPUBLICA remitió unas consultas a la Caja sobre este tema, pero al cierre de edición no hubo respuesta.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net
Falla la Caja en hipotecas
Pérdida de $3 millones de pensiones de empresarios y trabajadores en 2011
Esta fue una alternativa de ganar dinero y ayudarle al fondo de pensiones, para pagar a los trabajadores cuando llega el momento de su jubilación.
Sin embargo, el año pasado hubo $3 millones en préstamos incobrables, de gente que dejó de pagar, porque las cuotas aumentaron a un punto insostenible.
La morosidad fue del 2,8% de la cartera crediticia al cierre del año pasado, mientras que en la banca fue de un 1,3%.
Para que el negocio hipotecario siga siendo bueno, la morosidad no debe llegar al 3%.
El atraso en el pago de créditos comenzó a crecer desde octubre de 2010, cuando era del 2,4%, el doble que la tasa de la banca comercial.
Si la Caja estuviera sujeta a revisión financiera, como lo están los bancos, podría recibir una llamada de atención del supervisor estatal.
En este caso, son los jerarcas de la institución los que deben decidir cuáles acciones ejecutar para disminuir el riesgo que significa la morosidad.
El monto de los préstamos incobrables fue de $3 millones el año pasado, un 70% más que un año antes, cuando fue de poco más de $1,8 millones.
El deterioro crediticio en la Caja se debe en parte a que muchos de los préstamos se otorgaron a personas que no reunían las condiciones financieras, determinó un estudio de la institución.
Además, al inicio del año anterior aumentó en dos puntos porcentuales la tasa de interés hasta el 12%, mientras que varios bancos ofrecían préstamos hipotecarios por el orden del 9%.
La razón es que la Caja tiene sus créditos ajustados a la Tasa Básica Pasiva, y el alza de este índice encareció sus préstamos, mientras que los bancos tienen condiciones más favorables, como empréstitos a tasa fija.
La consecuencia de ambos factores fue que menos familias pudieron hacer frente al pago de su crédito.
Por ahora, los préstamos morosos y los incobrables están en proceso de cobro judicial, pero obtener el dinero o ejecutar el bien puesto en garantía es un proceso que tarda años.
Los recursos prestados por la Caja son parte de la cotización de cada trabajador, privado y público, para su pensión.
Así como el aporte que cada mes realizan empresarios.
A la fecha no se ha tomado ninguna acción para evitar un deterioro mayor al sufrido, denuncia la Contraloría.
Actualmente la institución tiene un total de 7 mil operaciones crediticias abiertas.
Junto a la pérdida de atractivo, la Caja tiene pocas opciones para competir contra las fuertes campañas hipotecarias de los bancos. Primero porque su oferta es más rígida y con nula posibilidad de realizar ofertas especiales en ferias de vivienda.
Además, el ente tiene un límite para la utilización de los recursos del régimen de pensiones que es el sustento de su cartera.
Mientras, los bancos tienen libertad para buscar recursos frescos sea en el mercado nacional o el extranjero. Así como ofrecer tasas de interés competitivas.
Para revitalizar el negocio hipotecario, la Caja aprobó una serie de medidas a finales de julio anterior.
Incorporó por primera vez la tasa fija de un 10% a sus nuevos créditos hasta por un periodo de tres años, aunque luego el préstamo estará ligado a la Tasa Básica Pasiva, con lo cual encarecería hasta un 14% a partir del cuarto año.
Asimismo amplió el monto máximo para prestar hasta los ¢100 millones y el plazo de los préstamos también subió hasta los 30 años.
Por último, la institución incrementó su meta de colocación hasta los ¢9,5 mil millones, mientras que el año anterior prestó ¢4 mil millones.
Sin embargo, está muy lejos de los ¢120 mil millones que el Banco Nacional se planteó como meta de colocación durante este año.
LA REPUBLICA remitió unas consultas a la Caja sobre este tema, pero al cierre de edición no hubo respuesta.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net