Fórmula 1 regresa a Netflix este año
Walter Herrera wherrera@larepublica.net | Martes 01 marzo, 2022
Desde que la Fórmula 1 y Netflix acordaron filmar a los distintos pilotos y equipos en la temporada 2018 para recrear toda la acción a través de una serie, el deporte no ha hecho más que crecer.
La F1 se ha nutrido de una audiencia más joven, aunque no todos comparten cómo ha llegado el nuevo público.
La plataforma de contenido audiovisual a la carta ofrecerá, antes de que comience la temporada 2022, una nueva entrega de ‘Formula 1: Drive To Survive’ (‘Fórmula 1: la emoción de un Grand Prix’ en su traducción al castellano). Lo que para muchos es una gran noticia, para el sector más crítico supone ya una batalla perdida. Y no, no solo hablamos de aficionados a la F1, sino también de algunos pilotos.
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Si bien es cierto que nadie puede obligar a una persona que no se divierta con una serie de entrenamiento, existen argumentos que explicarían por qué una parte de la afición no está de acuerdo con el mensaje que pretende emitir la compañía estadounidense sobre el deporte rey del automovilismo.
No hay duda de que Netflix refleja los hechos ocurridos en la pista año tras año. Eso sí, lo hace con artificialidad y desvirtuando la realidad. La épica está muy bien, siempre y cuando no se incluya el sonido de un V8 en una cámara a bordo de un V6 Turbo o cuando, en lugar de escuchar el frenado real de un monoplaza, posproducción prefiere incluir un motor al máximo de revoluciones en una imagen que distorsiona por completo una escena. Por cierto, Lando Norris y Carlos Sainz son muy amigos, aunque se pretenda vender un discurso opuesto.
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Ya se sabe la fecha de lanzamiento
El próximo 11 de marzo se estrenará la cuarta temporada. Será el momento ideal para representar la gran batalla que protagonizaron Lewis Hamilton y Max Verstappen por el título Mundial de 2021.
Cabe destacar que el neerlandés encabeza la lista de críticos hacia esta serie. De hecho, el piloto de Red Bull ya mostró su repulsa en referencia a la estrategia de desnaturalización de la competición por parte de Netflix.
No obstante, la apuesta de la F1 ha sido una victoria en términos de ingresos, visualizaciones y espectáculo, adquiriendo así una mayor popularidad en poblaciones estratégicas. Especialmente, en Estados Unidos, país que logró romper un récord de asistencia histórica en Austin la pasada campaña gracias, en parte, al efecto ‘Netflix’.