Gobierno de Solís transfirió ¢426 millones a Iglesia católica

Unos ¢426 millones es la cifra que el gobierno de Luis Guillermo Solís ha girado a la Iglesia católica este año, de acuerdo con datos suministrados por el Ministerio de Hacienda.
La mayor parte de las transferencias se dirigen a la diócesis de Tilarán, como parte de un acuerdo que suscribió Leonardo Garnier, cuando se desempeñaba como ministro de Educación, para que la Iglesia administrara los fondos que se destinarían a las escuelas de la zona.
Otra porción menor, unos ¢15 millones, se desviaron a la arquidiócesis de San José, para la restauración del archivo histórico.
“Si por A o por B una iglesia es declarada patrimonio cultural, el Estado debe asumir la responsabilidad de cuidarla”, explica José Francisco Pacheco, viceministro de Egresos.
En muchas ocasiones, los recursos del Estado que se desvían para administración de la Iglesia, se utilizan para el mejoramiento de las instalaciones en las escuelas públicas del país.
Pese a esto, la situación cuenta con la oposición de Patricia Mora, diputada del Frente Amplio, quien aboga porque Costa Rica sea un estado laico.
“Para escuelas y cualquier otro tipo de ayuda social está el Estado. Si las Iglesias quieren donar, que lo hagan con fondos propios. Los fondos del Estado los tiene que administrar el Estado, no una entidad como la Iglesia”, comentó Mora.
En el gobierno de Laura Chinchilla se destinaron ¢2,3 mil millones en transferencias a la Iglesia católica.
La legalidad de estas donaciones se basa en el artículo 75 de la Constitución Política.

Luis Fernando Cascante
lcascante@larepublica.net