La Inteligencia Artificial en los Procesos de Contratación Pública
Luis Alonso Quesada Díaz luisquesada@abogados.or.cr | Miércoles 29 noviembre, 2023
Lic. Luis Alonso Quesada Díaz, MBA
Abogado y Notario
Experto en Contratación Pública
La Inteligencia Artificial (IA) cada día es una herramienta presente en una gran parte de nuestras actividades cotidianas, desde la satisfacción de necesidades básicas hasta la adquisición de bienes y servicios especializados en los mas diversos ámbitos. Constantemente nos enfrentamos a procedimientos o mecanismos que sustituyen la presencia humana y resuelven con precisión asombrosa nuestras necesidades o las de nuestras empresas.
Para cumplir sus objetivos y satisfacer el fin público por el que fueron creadas, las distintas dependencias del Estado requieren de la compra de bienes y servicios y resulta ser una actividad típica para que la IA aparezca en escena. Ya con la anterior Ley de Contratación Administrativa del año 1996 se habían generado algunas reformas que daban vestigios de la inminente presencia de la IA en los procesos de compras con el Estado, y ahora con la reciente entrada en vigencia de la nueva Ley de Contratación Pública y su respectivo Reglamento en noviembre del año pasado 2022, se confirma categóricamente que estamos a las puertas para la aplicación de las mejores prácticas del e-Procurement y que pasará a ser parte de nuestra cotidianidad y el Estado, en el cumplimiento de sus fines y necesidades, no se escapa de ello.
Siendo contestes con esa realidad es que con la nueva ley se obliga a todas las instituciones y despachos del Estado a usar una plataforma electrónica de compras denominada SICOP, por medio de la cual se realizarán todos los procesos de compras de bienes y servicios y que representa la herramienta por medio de la cual la presencia de la IA, en cierta medida, hace su incipiente aparición. Por medio de dicha plataforma los usuarios o potenciales proveedores del Estado cumplen ciertos procesos y requerimientos en procura de vender sus productos al Estado por medio de un concurso público. Para algunos, la plataforma no resulta ser amigable pero lo cierto es que representa el importante avance ante la innegable presencia de la IA en la contratación pública, automatizando y simplificando los procesos.
Por medio del e-Procurement se pretende mayor eficiencia en las compras, ahorro, y un elemento de suma importancia como lo es la transparencia. Así las cosas, con la automatización de los procesos, la misma plataforma nos va permitiendo avanzar en el cumplimiento de los requisitos que el pliego de condiciones exige y sin los cuales no se puede seguir completando el proceso de concurso y poder aspirar a ser un potencial adjudicatario.
Ahora, en una cantidad considerable de estos procesos hay ausencia de recurso humano, aún y cuando estamos lejos de que se suprima la intervención humana en gran medida. Con el nivel de avance de la tecnología se puede pensar que en un futuro no muy lejano, la IA ganaría aún más terreno y se pueden automatizar aún más los procesos de compras. No está fuera de la realidad idear que para determinados bienes o servicios, y de la mano con el Plan Anual de Compras, se genere de manera automática un pliego de condiciones que al momento en que un oferente aplique, la misma plataforma sea capaz de identificar y filtrar de manera inmediata el cumplimiento o no de los requerimientos de ese pliego por medio de datos o información que el oferente alimente y que de manera automática se genere un reporte y por que no, hasta una recomendación de adjudicación, labor que actualmente está delegada a los operadores institucionales encargados de la evaluación de las ofertas, sean del área técnica, financiera o legal.
Bajo ese escenario, inclusive también el volumen de los actos recursivos disminuirían considerablemente pues la posibilidad de un error en la evaluación, siendo que todo se reduciría al cumplimiento de métricas y requisitos formales dentro de la plataforma, casi sería improbable o nula. No obstante lo anterior, se abre el debate de la suplantación de la mano de obra por la presencia de la IA en este tipo de procesos, y en donde pareciera que la presencia humana pierde terreno, dejando todo en manos de una gran plataforma integrada de datos que analizaría la información que la Administración y el usuario alimente y podría inclusive decidir que oferente es el que cumple a cabalidad con lo que pide la Administración en sus requerimientos cartelarios.
Normalmente nos encontramos con lecturas de situaciones futuristas que parecieran ser inspiradas en historias de ficción, pero no nos percatamos que ya forman parte -aunque de manera incipiente- de nuestro cotidiano quehacer, y en el Derecho cada vez mas nos enfrentaremos a una revolución digital impresionante y en donde la IA es sin duda alguna la protagonista estelar.