“Las mujeres tenemos que creérnosla”
Carolina Acuña cacuna@larepublica.net | Lunes 18 noviembre, 2013
Entrevista
Ingrid Guzmán, Scotia Fondos
“Las mujeres tenemos que creérnosla”
Primera directora de esa sociedad administradora de fondos
Ingrid, al entrar a la UCR eligió como carrera Farmacia, pero tras un año en el área de ciencias de la vida el glamour del sector financiero la sedujo y optó por asentarse en Administración de Empresas, formación que le dio las bases para lo que vendría, sin ella saberlo.
Entré como secretaria pero realmente siempre me ha gustado aprender un poco más de lo que mi puesto conlleva, así que mis jefes vieron mi potencial e iban ascendiéndome en responsabilidades, solo dos veces tuve que ir a pedir un ascenso yo”, explica la quien fue hace un par de meses la tesorera del banco.
Su vida no fue más fácil que para otras personas. El trabajo en Scotia (cuando entró era banco Interfin) lo buscó para poder pagar sus estudios, así que por un tiempo combinó ambas actividades. Además también vivió el dilema femenino de postergar ser madre por miedo a los sentimientos de culpabilidad que podría sentir si dedicaba poco tiempo a alguna de sus pasiones, su trabajo y sus hijos.
“Ahora puedo decir que esto de la familia es un trabajo en equipo. Con mi esposo pude evitar sobrerresponsabilizarme de las cosas y reconocer que no puedo hacerlo todo yo, ni todo lo que sale mal será mi culpa. Soy una mamá de gemelas con 8 años de edad, mi esposo y yo estamos 100% accesibles por teléfono, somos los que educamos y damos permisos a nuestras hijas, voy a las reuniones de la escuela, a las citas médicas. Reconozco que no hay una única receta y en mi caso, la ventaja es que el banco da apoyo a esos temas”, añade.
Ingrid es una firme creyente del apoyo y solidaridad femenina y ha estado involucrada en procesos de mentoría inspirando a compañeras a llegar más alto. “Lo más rico de ser mentora es el intercambio, es un aprendizaje en ambas vías”.
Su principal afán en trabajo es obtener resultados de manera efectiva, creando relaciones ganar-ganar. Se considera parte de la generación pionera en dar el salto de “mujer ama de casa” a “mujer profesional y de familia” y en el proceso reconoce la importancia de confiar en una misma, sus capacidades y perder el miedo. “Las mujeres tenemos que creérnosla. A veces nosotras mismas nos ponemos obstáculos y creemos que para optar por un puesto debemos tener el 100% de los requisitos, sin confiar en nuestra gran capacidad de aprender haciendo, de arriesgarnos”.
Su aspiración como persona es aprender cada día y ser una buena profesional y ser humano “con eso me doy por satisfecha”, concluye.
En el grupo Scotiabank un 45% de puestos de supervisión y gerencia son ocupados por mujeres, solo las vicepresidencias no cuentan con el talento femenino dentro de sus colaboradores.
Carolina Acuña
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