Londres teme el fin de la edad de oro con el Brexit
Bloomberg | Martes 21 junio, 2016
Casi no hay lugar donde las gallinas de los huevos de oro sean tan prolíficas como en la ciudad de Londres.
Las angostas calles del llamado Square Mile, bordeadas de bellos edificios neoclásicos de piedra y modernas torres de reluciente cristal, son el centro de un sector financiero británico que pagó 94 mil millones de impuestos el año pasado y emplea a más de 2 millones de personas en todo el país.
Sin embargo, en vísperas del referéndum del 23 de junio sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE), muchas de las luminarias de la ciudad están profundamente preocupadas por su futuro. Desde hace casi 30 años, cuando la primera ministra conservadora Margaret Thatcher liberalizó las finanzas por medio de un paquete de reformas tan drásticas que recibieron el nombre de “Big Bang”, Londres se ha convertido en la capital financiera indiscutida de la Europa unida, estatus que ahora pende de un hilo.
“El solo hecho de que la ciudad sea fuerte en este momento no significa que tenga el derecho perpetuo a seguir siéndolo”, dijo Marcus Agius, presidente de Barclays, durante la crisis financiera mundial de 2008. “El Brexit sería un acto de suprema locura. En el futuro, miraremos hacia atrás y nos preguntaremos: ‘¿Por qué diablos lo hicimos? ¿En qué pensábamos?’”
Quienes en la ciudad están a favor del Brexit lo consideran una manera de hacer que la industria financiera sea más competitiva en el plano mundial al liberarla de algunas normas de la UE como el techo impuesto a las bonificaciones. Pero, si bien el “Big Bang” de la década de 1980 atrajo a firmas internacionales, los ejecutivos de los bancos mundiales sostienen que un voto a favor de la salida de la UE las alejaría.
Ellas emplean al grueso de los 400 mil trabajadores del distrito financiero y han sido claras respecto de sus intenciones. El CEO de JPMorgan Chase, Jamie Dimon tiene 16 mil empleados en Londres y otras ciudades británicas, y este mes le dijo a su personal que una votación a favor de la salida podía llevar a la eliminación de una cuarta parte de esos puestos de trabajo.
Los ejecutivos de Citigroup, Goldman Sachs Group y HSBC Holdings han lanzado advertencias similares. El presidente de Deutsche Bank AG, Paul Achleitner, señaló que un Brexit sería “un desastre económico para el Reino Unido”, donde el banco emplea a más de 8 mil personas. Tampoco ayuda el hecho de que es un momento delicado para los banqueros en general; la preocupación por las perspectivas de la economía mundial sumada a la caída de las materias primas deprimió la negociación, mientras que las bajas tasas de interés redujeron los ingresos.