Más violaciones de Rodrigo Chaves Robles
Ricardo Sossa Ortiz redacción@larepublica.net | Lunes 13 enero, 2025
Ph.D. Ricardo Sossa Ortiz
Excomidionado Presidencial del Gobierno de Costa Rica y Dr. Honoris Causa
Inconcebible la violenta escalada de un hombre que se presentó como el defensor del pueblo y de sus minorías. Es simplemente una miniatura que se reduce a muchas características propias de diferentes sociopatías. Especialmente dos: el síndrome de la personalidad antisocial, que consiste en disfrutar haciendo el mal a otras personas sin ningún remordimiento, y también el señor Rodrigo Chaves presenta acciones típicas de la sociopatía conocida como el trastorno de la violencia intermitente. Este consiste, como lo hemos visto en él, en despotricar contra mujeres y hombres con insultos y hostigamiento verbal, para luego decir que se tomen una tacita de tilo y que les manda abrazos. Precisamente en eso consiste esta enfermedad sociopática, que oscila entre la paz y la violencia intermitente.
La reciente burla de Rodrigo Chaves Robles al presidente del Primer Poder de la República, el señor Rodrigo Arias Sánchez, demuestra, en mi criterio sociológico, sin lugar a dudas características de estas dos sociopatías lamentables. Para quienes elegimos como mandatario de nuestra nación, un error histórico que hemos de enmendar en las próximas elecciones y, sobre todo, la población adulta mayor y su descendencia, a la que ha ofendido en términos generales y por la cual ha recibido una carta pública de 88 geriatras costarricenses llamándole la atención por violar derechos de una población vulnerabilizada como lo ha sido la de los adultos mayores. No es de asombrarnos esta actitud, puesto que ya en el pasado también ha violentado los derechos humanos de poblaciones como la LGBTI+, exactamente el día 29 de junio del 2023, al anularles su derecho de contar con una declaratoria de interés cultural para su desfile anual. Razón por la que la Sala Constitucional lo ha condenado, indicando que fue una decisión "impestiva", característica también de las personas sociópatas.
En esta carta, los 88 geriatras resaltan lo siguiente:
“La gerontofobia no solo afecta directamente a las personas adultas mayores, sino que también debilita el tejido social, ignorando las valiosas contribuciones económicas, culturales y familiares que estas siguen realizando. Además, tales expresiones pueden socavar los esfuerzos institucionales y sociales destinados a garantizar los derechos de esta población, promovidos tanto por la legislación nacional como por acuerdos internacionales de los que Costa Rica es signataria, como la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en su programa de la Década del Envejecimiento Saludable (2021-2030), enfatiza la necesidad de combatir el edadismo en todas sus formas. Este esfuerzo global destaca la urgencia de erradicar los prejuicios por razón de edad y de promover una visión inclusiva que valore a las personas mayores como integrantes esenciales de nuestras comunidades.
Señor Presidente, las expresiones que descalifican o menosprecian a las personas adultas mayores perpetúan estereotipos dañinos y fomentan una discriminación inaceptable hacia quienes han contribuido significativamente a la construcción de nuestra nación. Como líder de la nación, sus palabras tienen un impacto profundo en la percepción y actitud de los ciudadanos hacia nuestras personas mayores. Por ello, le instamos respetuosamente a reflexionar y rectificar públicamente sus declaraciones, enviando un mensaje claro de respeto y valoración hacia esta población.
La Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores establece la obligación de combatir todo tipo de discriminación por razón de edad y de garantizar la plena inclusión de las personas mayores en todos los ámbitos de la vida social, económica y cultural. Sus declaraciones contradicen estos compromisos y pueden tener un efecto negativo en los esfuerzos institucionales destinados a garantizar los derechos de esta población”.
“Inclusión”, un tema de cero interés para Rodrigo Chaves Robles, como prueba el que no haya nombrado a un nuevo comisionado o comisionada de inclusión social, dando a entender, según parece, que no le interesa ni la inclusión, ni los derechos humanos, ni las poblaciones vulnerabilizadas.
Se debe destacar que el violento y sociopático acto de Chaves en contra del presidente del Poder Legislativo violenta, agrede con navaja y filo de espada la Carta de San José, acuerdo latinoamericano firmado en nuestra capital y que busca fortalecer los principios de inclusión y equidad que deben guiar nuestra sociedad. Este acuerdo reconoce el acceso a la justicia como un derecho humano esencial y hace énfasis en la importancia del acceso a la justicia como el instrumento que permite garantizar el ejercicio y defensa activa de los derechos de las personas adultas mayores.
Costa Rica ha asumido compromisos relevantes para la protección de los derechos de las personas mayores, tanto en el ámbito nacional como internacional.
Rodrigo Chaves Robles cree que hace gracia con una mente que pareciera retorcidamente infantilizada, desarrollada como la de un niño que hace una maldad y se ríe. También tira la piedra y esconde la mano, acto cobarde. Sin embargo, la gerontofobia es una forma de discriminación repudiable en cualquier parte del mundo y, sobre todo, en Costa Rica. Además de ser asquerosa, sucia, vulgar y un escupitajo a sus propios padres, abuelos y ancestros, así como a los nuestros en general.