Millones moverán megaestrellas
Oscar Rodriguez orodriguez@larepublica.net | Viernes 27 enero, 2012
Traer artistas reconocidos requiere inversión de hasta $1 millón
Millones moverán megaestrellas
Comercio, empleo y ganancias al Estado deja paso de divas y famosos
El hecho de que artistas de la talla de Elton John, Marc Anthony y Luis Miguel den conciertos en Costa Rica, casi al mismo tiempo, es un reflejo del boom de megaestrellas como un negocio que mueve millones de dólares.
Una infraestructura adecuada para grandes espectáculos, buen poder adquisitivo de los ticos, y que los propios artistas quieran conocer el país, son las razones de este auge.
El espectador es el principal ganador al poder ver a su grupo o cantante favorito. Además de que hay generación de empleo y llegada de turistas.
Los retos futuros de la industria son contar con espacios de diversos aforos y transparencia en la regulación.
El negocio de los espectáculos está en alza pues, a partir de febrero, comienza una seguidilla de presentaciones de artistas famosos.
El inglés Elton John será el primer artista que dará un recital, este 3 de febrero; y unas 20 mil personas podrían verlo.
De venderse la totalidad de las entradas se estima que los ingresos ascenderían a unos $1,6 millones, solo por concepto de taquilla.
Luego seguirán Marc Anthony y el mexicano Luis Miguel.
En marzo se realizará el Festival Imperial, donde suenan con fuerza, pero aún sin confirmar, Foo Fighters, Maroon 5, e incluso la islandesa Björk.
Entre las estrellas que se rumora tocarían, a mitad de año, están los emblemáticos The Rolling Stones y AC/DC.
Traer al país una megaestrella oscila entre $20 mil y $1 millón.
El valor de contratación de artistas musicales es un dato guardado con recelo, pues en muchos casos se estipula la confidencialidad en los convenios firmados.
Además, la venta de boletos por Internet a través de compañías especializadas genera entre ¢1.500 y ¢3 mil por tiquete vendido.
Un 85% de los tiquetes vendidos se adquiere en la Web.
“La venta de entradas por Internet da confianza porque es segura”, afirma Róger Brenes, director de Special Ticket, uno de los portales dedicados a esta actividad.
Por otra parte, el Estado es uno de los grandes favorecidos con la industria de los espectáculos, pues por cada boleto vendido cobra un 31% de impuestos.
El repunte de la llegada de estrellas al país comenzó hace cuatro años, con los conciertos de artistas como Iron Maiden, Metallica, Alejandro Sanz o Ricky Martin.
Hay varias razones que sustentan el auge de la industria de los espectáculos musicales.
La principal es la demanda del público de ver en vivo a estas estrellas.
Los productores comenzaron a contratar grupos reconocidos debido a que el espectador nacional tiene un nivel de ingresos mayor y hay más opciones para financiar la compra de un boleto.
Otra razón del boom es contar con más lugares para realizar actividades. El Estadio Nacional es sin duda un gancho para la industria.
“Ha crecido el interés de empresas por convertirse en patrocinadoras por la mejora de infraestructura y la capacidad técnica para hacer espectáculos”, explicó Gisela Sánchez, directora de relaciones corporativas de Florida Bebidas, que organiza el Festival Imperial.
Además de que los artistas saben de que Costa Rica es un buen lugar para dar conciertos y vacacionar.
“Ahora los grupos piden parar aquí cuando van de México a Sudamérica”, dijo Don Stockwell, de Tropix II, empresa que trajo a Aerosmith.
Los espectadores son los principales ganadores con el crecimiento de la industria de los espectáculos.
Con el negocio de los espectáculos hay más favorecidos porque organizar un concierto significa, literalmente, crear una pequeña ciudad.
El resultado es una generación de empleo en torno a un espectáculo que puede alcanzar, el día del evento, hasta unas mil personas.
Seguridad, restaurantes de comida rápida, y hasta grúas para construir un escenario son algunos de los trabajos indispensables.
La banca es otro de los sectores favorecidos al ofrecer descuentos de hasta un 10% o tasa cero si se adquieren los tiquetes con sus tarjetas de crédito y débito.
Credomatic es el principal actor en esta área.
En su lista de patrocinio hay nombres de artistas como Elton John o Chayanne.
“Más que una nueva oportunidad de negocio, lo que vemos es una forma de atender los gustos de nuestros clientes”, dijo José Ignacio Cordero, gerente general de Credomatic.
Los conciertos también generan un nuevo nivel de turismo. Miles de centroamericanos han acudido al país para ver a sus artistas preferidos.
“Su estadía aquí no solo es en la fecha del concierto, sino que aprovechan y visitan playas o parques nacionales”, dijo Arnoldo Herrera, director general de Interamericana de Producción que este año traerá a los españoles Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat.
También hay una generación de una economía informal alrededor de los conciertos.
Muchísimas personas aprovechan para vender, en las afueras de los recintos todo tipo de cosas.
Los diversos actores involucrados en el negocio de los espectáculos auguran un futuro prometedor. Sin embargo, la industria enfrenta algunos retos.
Uno de estos es que no existe un lugar para ofrecer conciertos con capacidad media de público, entre 10 mil o 15 mil personas.
Los teatros disponibles tienen capacidad para unas 3 mil personas; mientras que los estadios acogen hasta más de 30 mil.
Los productores musicales también critican la incongruencia en las reglas de juego.
Por ejemplo, por el alquiler del Estadio Nacional pagaban unos $60 mil y ahora el costo aumentó a $200 mil.
Este aspecto es negociado con los administradores del estadio porque puede desincentivar la actividad de los espectáculos.
Incluso algunas empresas anunciaron, días atrás, que no volverán a alquilar este lugar porque el precio es excesivo.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net
Millones moverán megaestrellas
Comercio, empleo y ganancias al Estado deja paso de divas y famosos
El hecho de que artistas de la talla de Elton John, Marc Anthony y Luis Miguel den conciertos en Costa Rica, casi al mismo tiempo, es un reflejo del boom de megaestrellas como un negocio que mueve millones de dólares.
Una infraestructura adecuada para grandes espectáculos, buen poder adquisitivo de los ticos, y que los propios artistas quieran conocer el país, son las razones de este auge.
El espectador es el principal ganador al poder ver a su grupo o cantante favorito. Además de que hay generación de empleo y llegada de turistas.
Los retos futuros de la industria son contar con espacios de diversos aforos y transparencia en la regulación.
El negocio de los espectáculos está en alza pues, a partir de febrero, comienza una seguidilla de presentaciones de artistas famosos.
El inglés Elton John será el primer artista que dará un recital, este 3 de febrero; y unas 20 mil personas podrían verlo.
De venderse la totalidad de las entradas se estima que los ingresos ascenderían a unos $1,6 millones, solo por concepto de taquilla.
Luego seguirán Marc Anthony y el mexicano Luis Miguel.
En marzo se realizará el Festival Imperial, donde suenan con fuerza, pero aún sin confirmar, Foo Fighters, Maroon 5, e incluso la islandesa Björk.
Entre las estrellas que se rumora tocarían, a mitad de año, están los emblemáticos The Rolling Stones y AC/DC.
Traer al país una megaestrella oscila entre $20 mil y $1 millón.
El valor de contratación de artistas musicales es un dato guardado con recelo, pues en muchos casos se estipula la confidencialidad en los convenios firmados.
Además, la venta de boletos por Internet a través de compañías especializadas genera entre ¢1.500 y ¢3 mil por tiquete vendido.
Un 85% de los tiquetes vendidos se adquiere en la Web.
“La venta de entradas por Internet da confianza porque es segura”, afirma Róger Brenes, director de Special Ticket, uno de los portales dedicados a esta actividad.
Por otra parte, el Estado es uno de los grandes favorecidos con la industria de los espectáculos, pues por cada boleto vendido cobra un 31% de impuestos.
El repunte de la llegada de estrellas al país comenzó hace cuatro años, con los conciertos de artistas como Iron Maiden, Metallica, Alejandro Sanz o Ricky Martin.
Hay varias razones que sustentan el auge de la industria de los espectáculos musicales.
La principal es la demanda del público de ver en vivo a estas estrellas.
Los productores comenzaron a contratar grupos reconocidos debido a que el espectador nacional tiene un nivel de ingresos mayor y hay más opciones para financiar la compra de un boleto.
Otra razón del boom es contar con más lugares para realizar actividades. El Estadio Nacional es sin duda un gancho para la industria.
“Ha crecido el interés de empresas por convertirse en patrocinadoras por la mejora de infraestructura y la capacidad técnica para hacer espectáculos”, explicó Gisela Sánchez, directora de relaciones corporativas de Florida Bebidas, que organiza el Festival Imperial.
Además de que los artistas saben de que Costa Rica es un buen lugar para dar conciertos y vacacionar.
“Ahora los grupos piden parar aquí cuando van de México a Sudamérica”, dijo Don Stockwell, de Tropix II, empresa que trajo a Aerosmith.
Los espectadores son los principales ganadores con el crecimiento de la industria de los espectáculos.
Con el negocio de los espectáculos hay más favorecidos porque organizar un concierto significa, literalmente, crear una pequeña ciudad.
El resultado es una generación de empleo en torno a un espectáculo que puede alcanzar, el día del evento, hasta unas mil personas.
Seguridad, restaurantes de comida rápida, y hasta grúas para construir un escenario son algunos de los trabajos indispensables.
La banca es otro de los sectores favorecidos al ofrecer descuentos de hasta un 10% o tasa cero si se adquieren los tiquetes con sus tarjetas de crédito y débito.
Credomatic es el principal actor en esta área.
En su lista de patrocinio hay nombres de artistas como Elton John o Chayanne.
“Más que una nueva oportunidad de negocio, lo que vemos es una forma de atender los gustos de nuestros clientes”, dijo José Ignacio Cordero, gerente general de Credomatic.
Los conciertos también generan un nuevo nivel de turismo. Miles de centroamericanos han acudido al país para ver a sus artistas preferidos.
“Su estadía aquí no solo es en la fecha del concierto, sino que aprovechan y visitan playas o parques nacionales”, dijo Arnoldo Herrera, director general de Interamericana de Producción que este año traerá a los españoles Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat.
También hay una generación de una economía informal alrededor de los conciertos.
Muchísimas personas aprovechan para vender, en las afueras de los recintos todo tipo de cosas.
Los diversos actores involucrados en el negocio de los espectáculos auguran un futuro prometedor. Sin embargo, la industria enfrenta algunos retos.
Uno de estos es que no existe un lugar para ofrecer conciertos con capacidad media de público, entre 10 mil o 15 mil personas.
Los teatros disponibles tienen capacidad para unas 3 mil personas; mientras que los estadios acogen hasta más de 30 mil.
Los productores musicales también critican la incongruencia en las reglas de juego.
Por ejemplo, por el alquiler del Estadio Nacional pagaban unos $60 mil y ahora el costo aumentó a $200 mil.
Este aspecto es negociado con los administradores del estadio porque puede desincentivar la actividad de los espectáculos.
Incluso algunas empresas anunciaron, días atrás, que no volverán a alquilar este lugar porque el precio es excesivo.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net