Negativa a bajar precios obligaría a intervenir mercados
Natasha Cambronero redaccion@larepublica.net | Lunes 19 enero, 2009
Trigo, arroz y fertilizantes serían los primeros candidatos a los cuales se fijaría rebaja
Negativa a bajar precios obligaría a intervenir mercados
• Decreto de fijación de precios entraría a regir de no registrarse una baja inmediata
Natasha Cambronero y Ernesto José Villalobos
ncambronero@larepublica.net
evillalobos@larepublica.net
En marzo de 2008, Rafael Mata pagó ¢35.200 por el saco de harina que habitualmente compra para abastecer su panadería en San Antonio de Belén.
Para agosto, mientras en el mercado internacional los precios del trigo ya habían reportado una baja sustancial, el saco de trigo no había bajado para el consumo nacional, lo cual motivó el primer cuestionamiento por parte del panadero.
Ya en octubre, la preocupación pasó a ser disgusto, pues en los mercados de Chicago y Minnesota este grano costaba un 60% menos que siete meses antes y pese a ello, el saco para consumo nacional había bajado apenas ¢2.050, es decir, menos de un 5%.Y aún todavía, los precios del insumo no han bajado al mismo nivel que el internacional.
Esto ha traído un efecto inmediato para el consumidor final. A pesar de que en el proceso de panificación la harina representa un 40%, los precios del pan no reportaron bajas sustanciales durante 2008.
En contraste al comportamiento de los mercados internacionales, una de las principales cadenas de panaderías del país, aplicó en noviembre un alza de ¢25 en el bollo Baguette; la presentación de mayor consumo entre los costarricenses.
Situaciones como esta, la cual no solo se presenta en este grano, sino también en productos como el arroz y los agroquímicos, ha obligado al Ejecutivo a realizar una serie de estudios para establecer si existe manipulación en los precios de los mismos y determinar una posible intervención por parte del Estado en los tres mercados.
Desde hace varias semanas el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (Meic) analiza el comportamiento de estos tres insumos y estaría decretando una fijación de sus precios de no presentarse una rebaja inmediata.
“La semana pasada terminamos de analizar la información relacionada a la harina de trigo, y nos reunimos con los proveedores. Esta semana estaremos analizando lo que haya que hacer en términos de garantizar a los costarricenses el mejor acceso a productos que son de consumo básico”, dijo José Antonio Blanco, director de Promoción de la Competitividad del Meic.
No obstante, los industriales del sector trigo defienden su posición. Ellos aducen que los inventarios existentes fueron adquiridos a precios altos y por ello mantienen los precios tal y como están.
En el caso de los agroquímicos y fertilizantes se pretende que el precio de los mismos logre tener una rebaja de por lo menos un 35% antes de que finalice el primer trimestre de 2009, para garantizar un mayor desarrollo en el sector agrícola del país.
Desde la semana pasada se encuentran en conversaciones con los productores nacionales e importadores de insumos agropecuarios para lograr una reducción lo más pronto posible.
“Estamos negociando con las empresas, porque ellas tienen el derecho de dar su opinión. A veces pasa que llegamos a un acuerdo y no hace falta realizar una fijación de los precios”, aseguró Eduardo Sibaja, viceministro de Economía.
La situación actual se debe a la incertidumbre que existe en los mercados internacionales y a los grandes inventarios de productos que actualmente tienen las empresas, aducen los comerciantes de agroquímicos en el país.
“Las materias primas para la fabricación de estos insumos son importadas. Estamos a merced directa de los vaivenes de los mercados internacionales. Además, las empresas aumentaron su stock, pues en su momento era una mejor inversión teniendo mercadería almacenada, ya que continuamente iban en aumento los precios”, afirmó Eduardo Robert, director de la Cámara de Insumos Agropecuarios.
No obstante, estarían a favor de una regulación si se demuestra una eventual manipulación por parte de las compañías.
“Es muy probable que antes de que finalice este trimestre si se mantienen las condiciones del mercado, se dé un cambio hacia la baja en el precio. De encontrarse acciones monopolizadoras, estaríamos de acuerdo con una intervención del mercado”, añadió Robert.
Algo similar sucede en el caso del arroz, producto que a pesar de ser actualmente uno de los pocos que es regulado, no ha presentado una rebaja sustancial para los consumidores, de acuerdo con las variaciones en el mercado internacional.
Ante esto, el Meic pretende que este grano baje un 5% a finales de este mes o a principios de febrero.
La baja que pretende realizar el Ejecutivo se debe a que el país importó 66 mil toneladas de arroz a un precio inferior en relación a lo que cuesta producirlo en el país, explicó Sibaja.
Negativa a bajar precios obligaría a intervenir mercados
• Decreto de fijación de precios entraría a regir de no registrarse una baja inmediata
Natasha Cambronero y Ernesto José Villalobos
ncambronero@larepublica.net
evillalobos@larepublica.net
En marzo de 2008, Rafael Mata pagó ¢35.200 por el saco de harina que habitualmente compra para abastecer su panadería en San Antonio de Belén.
Para agosto, mientras en el mercado internacional los precios del trigo ya habían reportado una baja sustancial, el saco de trigo no había bajado para el consumo nacional, lo cual motivó el primer cuestionamiento por parte del panadero.
Ya en octubre, la preocupación pasó a ser disgusto, pues en los mercados de Chicago y Minnesota este grano costaba un 60% menos que siete meses antes y pese a ello, el saco para consumo nacional había bajado apenas ¢2.050, es decir, menos de un 5%.Y aún todavía, los precios del insumo no han bajado al mismo nivel que el internacional.
Esto ha traído un efecto inmediato para el consumidor final. A pesar de que en el proceso de panificación la harina representa un 40%, los precios del pan no reportaron bajas sustanciales durante 2008.
En contraste al comportamiento de los mercados internacionales, una de las principales cadenas de panaderías del país, aplicó en noviembre un alza de ¢25 en el bollo Baguette; la presentación de mayor consumo entre los costarricenses.
Situaciones como esta, la cual no solo se presenta en este grano, sino también en productos como el arroz y los agroquímicos, ha obligado al Ejecutivo a realizar una serie de estudios para establecer si existe manipulación en los precios de los mismos y determinar una posible intervención por parte del Estado en los tres mercados.
Desde hace varias semanas el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (Meic) analiza el comportamiento de estos tres insumos y estaría decretando una fijación de sus precios de no presentarse una rebaja inmediata.
“La semana pasada terminamos de analizar la información relacionada a la harina de trigo, y nos reunimos con los proveedores. Esta semana estaremos analizando lo que haya que hacer en términos de garantizar a los costarricenses el mejor acceso a productos que son de consumo básico”, dijo José Antonio Blanco, director de Promoción de la Competitividad del Meic.
No obstante, los industriales del sector trigo defienden su posición. Ellos aducen que los inventarios existentes fueron adquiridos a precios altos y por ello mantienen los precios tal y como están.
En el caso de los agroquímicos y fertilizantes se pretende que el precio de los mismos logre tener una rebaja de por lo menos un 35% antes de que finalice el primer trimestre de 2009, para garantizar un mayor desarrollo en el sector agrícola del país.
Desde la semana pasada se encuentran en conversaciones con los productores nacionales e importadores de insumos agropecuarios para lograr una reducción lo más pronto posible.
“Estamos negociando con las empresas, porque ellas tienen el derecho de dar su opinión. A veces pasa que llegamos a un acuerdo y no hace falta realizar una fijación de los precios”, aseguró Eduardo Sibaja, viceministro de Economía.
La situación actual se debe a la incertidumbre que existe en los mercados internacionales y a los grandes inventarios de productos que actualmente tienen las empresas, aducen los comerciantes de agroquímicos en el país.
“Las materias primas para la fabricación de estos insumos son importadas. Estamos a merced directa de los vaivenes de los mercados internacionales. Además, las empresas aumentaron su stock, pues en su momento era una mejor inversión teniendo mercadería almacenada, ya que continuamente iban en aumento los precios”, afirmó Eduardo Robert, director de la Cámara de Insumos Agropecuarios.
No obstante, estarían a favor de una regulación si se demuestra una eventual manipulación por parte de las compañías.
“Es muy probable que antes de que finalice este trimestre si se mantienen las condiciones del mercado, se dé un cambio hacia la baja en el precio. De encontrarse acciones monopolizadoras, estaríamos de acuerdo con una intervención del mercado”, añadió Robert.
Algo similar sucede en el caso del arroz, producto que a pesar de ser actualmente uno de los pocos que es regulado, no ha presentado una rebaja sustancial para los consumidores, de acuerdo con las variaciones en el mercado internacional.
Ante esto, el Meic pretende que este grano baje un 5% a finales de este mes o a principios de febrero.
La baja que pretende realizar el Ejecutivo se debe a que el país importó 66 mil toneladas de arroz a un precio inferior en relación a lo que cuesta producirlo en el país, explicó Sibaja.