Nuevo impuesto bajaría ganancias inmobiliarias
Carolina Acuña cacuna@larepublica.net | Lunes 07 noviembre, 2011
• Duplicación del costo de traspasos disminuiría ventas
Nuevo impuesto bajaría ganancias inmobiliarias
• Cobro de IVA a venta de propiedades más bien “ordenaría el mercado”
Los cambios propuestos en el plan fiscal, por un lado podrían contraer el mercado inmobiliario, pero por otro ordenarían los ingresos que esta actividad genera.
Duplicar del 1,5% al 3% sobre valor del inmueble el impuesto a los traspasos de bienes, propuesto en el texto, significaría un costo nuevo para el sector construcción que afectaría el volumen de ventas y las ganancias de quienes se dedican a bienes raíces. Asimismo se afectaría el flujo de caja de productos financieros como los fondos de inversión inmobiliarios, los cuales deberían sumar estos costos a su operativa.
“Definitivamente, un incremento como el que propone el Ministerio de Hacienda es un golpe muy duro para el costarricense, quien ya en este momento siente que el 1,5% es muy difícil de pagar. Recordemos que la mayoría de las compras de propiedades se hace a través de un préstamo bancario, y a veces ese porcentaje incrementa la carga del préstamo”, dijo Aleyda Bonilla, presidenta de la Cámara de Corredores de Bienes Raíces.
El efecto inicial del aumento en el impuesto sería para los corredores, quienes tendrán que explicar a sus clientes por qué elevan sus precios, o ante la imposibilidad de subirlos, que vean afectadas sus comisiones.
“Por ejemplo, en una desarrolladora que construya un edificio para una empresa de zona franca ese porcentaje es un montón de dinero ya que esas construcciones son de millones de dólares y miles de metros cuadrados”, dijo Danny Quirós, consultor de inteligencia de mercados de Colliers International.
Otro efecto secundario posible es que tras una leve reactivación de la construcción se reduzca la demanda y se genere una guerra de precios. “Aunque ahora ya los precios están muy bajos y no hay mucho espacio para bajar más”, dijo Quirós quien agregó que la medida sería solo en casos de desesperación del desarrollador.
Asimismo el impuesto tendrá un efecto negativo, tanto en la colocación de créditos para compra de bienes inmuebles, como en la venta de bienes temporales de los bancos, según explica el análisis que hizo el Banco Nacional sobre la reforma, del cual tiene copia INVERSIONISTA.
Entre las alertas del banco más grande del país está que este aumento incentivaría la creación de fideicomisos y otras figuras contractuales que permitan evadir el pago del impuesto de traspaso.
Pero otra de las medidas que pretende el plan fiscal es cobrar un impuesto al valor agregado (IVA) del 14% a las ventas de estos inmuebles, lo cual más bien ordenaría el mercado ya que serían ingresos deducibles y generarían una trazabilidad de estas transacciones para el fisco.
“Este impuesto existe desde hace muchos años, no es nuevo, lo que pasa es que al no haber una regulación específica sobre la actividad inmobiliaria, los corredores que no están afiliados a una asociación, como la nuestra simplemente no pagan” dijo Bonilla. “Es una obligación de todo corredor depositar en las arcas de Hacienda lo correspondiente al impuesto de ventas sobre la comisión recibida”, añadió.
Según datos de la Cámara, la mayoría de los corredores no están inscritos en Hacienda como tales, y tampoco reportan esos ingresos para el pago de renta, por lo que el cobro del IVA podría generar un control cruzado para el fisco.
“Este es un tema en el que debemos trabajar para buscar una solución y que el país pueda recaudar estos impuestos, de manera eficiente y justa para todos”, concluye Bonilla.
Carolina Acuña
cacuna@larepublica.net
Nuevo impuesto bajaría ganancias inmobiliarias
• Cobro de IVA a venta de propiedades más bien “ordenaría el mercado”
Los cambios propuestos en el plan fiscal, por un lado podrían contraer el mercado inmobiliario, pero por otro ordenarían los ingresos que esta actividad genera.
Duplicar del 1,5% al 3% sobre valor del inmueble el impuesto a los traspasos de bienes, propuesto en el texto, significaría un costo nuevo para el sector construcción que afectaría el volumen de ventas y las ganancias de quienes se dedican a bienes raíces. Asimismo se afectaría el flujo de caja de productos financieros como los fondos de inversión inmobiliarios, los cuales deberían sumar estos costos a su operativa.
“Definitivamente, un incremento como el que propone el Ministerio de Hacienda es un golpe muy duro para el costarricense, quien ya en este momento siente que el 1,5% es muy difícil de pagar. Recordemos que la mayoría de las compras de propiedades se hace a través de un préstamo bancario, y a veces ese porcentaje incrementa la carga del préstamo”, dijo Aleyda Bonilla, presidenta de la Cámara de Corredores de Bienes Raíces.
El efecto inicial del aumento en el impuesto sería para los corredores, quienes tendrán que explicar a sus clientes por qué elevan sus precios, o ante la imposibilidad de subirlos, que vean afectadas sus comisiones.
“Por ejemplo, en una desarrolladora que construya un edificio para una empresa de zona franca ese porcentaje es un montón de dinero ya que esas construcciones son de millones de dólares y miles de metros cuadrados”, dijo Danny Quirós, consultor de inteligencia de mercados de Colliers International.
Otro efecto secundario posible es que tras una leve reactivación de la construcción se reduzca la demanda y se genere una guerra de precios. “Aunque ahora ya los precios están muy bajos y no hay mucho espacio para bajar más”, dijo Quirós quien agregó que la medida sería solo en casos de desesperación del desarrollador.
Asimismo el impuesto tendrá un efecto negativo, tanto en la colocación de créditos para compra de bienes inmuebles, como en la venta de bienes temporales de los bancos, según explica el análisis que hizo el Banco Nacional sobre la reforma, del cual tiene copia INVERSIONISTA.
Entre las alertas del banco más grande del país está que este aumento incentivaría la creación de fideicomisos y otras figuras contractuales que permitan evadir el pago del impuesto de traspaso.
Pero otra de las medidas que pretende el plan fiscal es cobrar un impuesto al valor agregado (IVA) del 14% a las ventas de estos inmuebles, lo cual más bien ordenaría el mercado ya que serían ingresos deducibles y generarían una trazabilidad de estas transacciones para el fisco.
“Este impuesto existe desde hace muchos años, no es nuevo, lo que pasa es que al no haber una regulación específica sobre la actividad inmobiliaria, los corredores que no están afiliados a una asociación, como la nuestra simplemente no pagan” dijo Bonilla. “Es una obligación de todo corredor depositar en las arcas de Hacienda lo correspondiente al impuesto de ventas sobre la comisión recibida”, añadió.
Según datos de la Cámara, la mayoría de los corredores no están inscritos en Hacienda como tales, y tampoco reportan esos ingresos para el pago de renta, por lo que el cobro del IVA podría generar un control cruzado para el fisco.
“Este es un tema en el que debemos trabajar para buscar una solución y que el país pueda recaudar estos impuestos, de manera eficiente y justa para todos”, concluye Bonilla.
Carolina Acuña
cacuna@larepublica.net