OCDE: ¿qué sigue ahora?
Jonathan Prendas jonathan.prendas@gmail.com | Lunes 26 abril, 2021
Jonathan Prendas
Diputado
Nueva República
La Asamblea Legislativa comenzó la discusión y está muy cerca de aprobar el convenio de ingreso de Costa Rica a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), un hito que demuestra que los costarricenses podemos trabajar unidos, en equipo, con metas, plazos, franqueza y transparencia.
Como presidente de la comisión legislativa que analizó y aprobó los 14 proyectos de ley necesarios para cumplir con esta meta, estoy convencido de que la incorporación del país a ese organismo ayudará a Costa Rica a afrontar de mejor manera los retos que vendrán después del Covid-19.
El partido Nueva República siempre se ha referido al enorme potencial que tendrá nuestro país para crecer y hacer negocios, pues la organización es la cuna de las mejores prácticas internacionales, sus países miembros representan el 75% de la inversión extranjera a nivel global y concentran al menos el 60% del comercio mundial. Pero nuestras oportunidades son aún mayores.
Tras la aprobación del convenio, en los próximos días, el siguiente paso es que la OCDE acompañe a Costa Rica en las reformas estructurales que el país requiere para dinamizar la actividad económica, que nos asesore tanto en los procesos macroeconómicos como fiscales a fin de mejorar de manera sensible los indicadores en la balanza de pagos.
Será necesario potenciar la cooperación, el comercio, abrir el diálogo multinacional en una vía de doble sentido; es imprescindible incorporar las lecciones más valiosas que los países miembros de OCDE nos puedan proporcionar, pero también es el momento de aportar, de recuperar el liderazgo de Costa Rica en la región, fortalecer las áreas y experiencias de éxito que nos han dado renombre a nivel mundial.
El otro gran reto hacia el futuro implica ajustarse a los parámetros de esa organización en ámbitos tan variados como la productividad, competencia, educación, salud, finanzas, seguridad social, gobierno corporativo y supervisión consolidada. La implementación de las recomendaciones de la OCDE dará como resultado ahorros significativos, mejores servicios para los ciudadanos y sobre todo marcarán una senda de desarrollo para el país.
Aun sin ser miembros, la OCDE nos ha indicado algunas de nuestras deficiencias, incluso ha sugerido algunas rutas a seguir. Por ejemplo, señaló la creación de empleo formal como nuestra prioridad política, recomendó reformas para eliminar los obstáculos a la entrada de empresas, mejorar la calidad de la educación, eliminar gradualmente las exenciones en arroz, azúcar y establecer indicadores de desempeño en las instituciones públicas.
Sugirió racionalizar los incentivos del sector público, centralizar las compras estatales, disminuir cargas sociales a las empresas así como ligar el financiamiento de las universidades con las necesidades del mercado laboral. Nos ha llamado la atención por la escasa competencia en sectores como la banca, la electricidad o el transporte y por figurar entre los países que menos invierten en gasto social.
La incorporación a la OCDE no será el piso: representa la posibilidad de que el país reciba evaluaciones de los mejores especialistas, es una oportunidad para replicar y ajustar a nuestra realidad las mejores prácticas internacionales para incrementar la calidad de vida de los costarricenses.
En momentos en que es necesario trazar la ruta hacia la recuperación económica para superar los efectos de la pandemia, Nueva República confía en que la gran mayoría de los diputados apoyará la adhesión a la OCDE y está dispuesta a propiciar las transformaciones que el país necesita para alcanzar la prosperidad que todos deseamos.