Ola de migrantes hay que dejarla pasar
Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Jueves 02 junio, 2016
Ante la inminente llegada de nuevas oleadas de migrantes africanos, la mejor opción para Costa Rica es facilitar su salida, así como buscar la cooperación financiera internacional, para atender esta problemática a largo plazo.
Esos son los principales consejos que brindan exministros de Seguridad, exdiplomáticos y políticos al Gobierno, que atiende en refugios a más de 600 africanos de países como Malí y Ghana, mientras desconoce el paradero de otro grupo de 1.300 africanos que ingresaron a suelo nacional y que se presume, ya habrían cruzado la frontera norte con ayuda de coyotes.
La presencia del Ejército de Nicaragua en Peñas Blancas tampoco ha podido frenar a los migrantes, asevera Carlos Roverssi, excanciller de la República.
Ante este panorama, la solución más pragmática es que ellos encuentren su propio camino hacia el norte.
Mientras tanto, hacer deportaciones masivas no es una opción, debido al alto costo y a la imposibilidad material de determinar de dónde son los refugiados, ya que muchos de ellos no tienen pasaporte.
Asimismo, tampoco se pueden devolver a Panamá u otro país, ya que no son recibidos.
Hasta el momento, los países suramericanos no han puesto obstáculos y por ello, estos han llegado hasta Panamá y Costa Rica, en donde han encontrado cierta resistencia.
Durante meses, los africanos utilizaron Brasil y Ecuador como puente de ingreso para escapar a la pobreza y conflictos bélicos, ya que esos países no les piden visa.
Como el problema se presume que sea permanente para Costa Rica, se requiere ayuda internacional “económica y técnica”, para garantizar el respeto de los derechos humanos.
Organismos como la Agencia de la ONU para los Refugiados, y la Organización Internacional de las Migraciones, podrían darle soporte al país, asevera Patricia Mora, presidenta del Frente Amplio.
Mientras tanto, el Gobierno tiene en diferentes refugios a unos 600 africanos, a los cuales se les da asistencia básica que incluye comida, servicios de salud y hospedaje, entre otros.
En cuanto a los esfuerzos internacionales, se entiende que la problemática migratoria será permanente, por eso el país ha pedido a la OEA y a la Comunidad Latinoamericana y del Caribe estudiar este tema para ofrecer una posición permanente.