Pensar a largo plazo
Carmen Juncos cjuncos@larepublica.net | Jueves 07 agosto, 2008
Pensar a largo plazo
Se inicia un proyecto para convertir el Museo de Arte Costarricense en algo atractivo para nacionales y extranjeros. Así lo confirmó su nuevo director, Eduardo Faith, en entrevista con Magazine
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net
Con un plan muy claro y viable para transformar el Museo de Arte Costarricense (MAC) en un lugar apetecido por nacionales y extranjeros, el flamante director de esa entidad, Eduardo Faith Jiménez, llega dispuesto a aprovechar al máximo el tiempo de que dispone.
En el mundo más desarrollado la década de los años 70 marcó la gran explosión del nuevo concepto de museos que logró convertirlos en centro de atracción.
Se invirtió en dotarlos de un glamoroso edificio y luego en exhibir ahí productos apetecidos por la gente desde el arte tradicional hasta novedosas muestras de objetos ligados a la vida cotidiana (como las motocicletas) transformados en arte por medio del diseño.
En Costa Rica el MAC requería con urgencia una transformación por dos razones: para que cumpla realmente con su función y para reparar su infraestructura muy deteriorada en algunos aspectos como sus instalaciones eléctricas, entre otros.
El nuevo director diseñó su plan en tres pasos: el primero, destinado a retirar de ese edificio algunas áreas que serán ubicadas en una nueva instalación cuyo lugar está en estudio.
Este nuevo espacio del MAC será una especie de nave industrial que acoja el sitio destinado al acopio de obras, museografía, servicios técnicos, centro de documentación y oficinas administrativas.
Un segundo paso será reparar y readecuar las instalaciones para utilizarlas únicamente en mantener una exposición que, de manera clara y fácil de captar, evidencie la evolución del arte costarricense y permita a los nacionales reconocerse a sí mismos a través de ella.
Y posteriormente al montaje del nuevo diseño, y a la implementación de servicios de soporte como una cafetería, una tienda y una biblioteca, entre otros, valorar la mejor vía para mercadear en forma adecuada ese producto como valioso bien cultural que es, ofrecido ahora de modo tal que pueda ser apetecido para su consumo en el buen sentido del término por nacionales y extranjeros.
Los grandes museos del mundo han sabido crear un nicho de mercado y en Costa Rica eso no se hizo ni desde el sistema educativo ni desde los museos mismos, explica Faith.
Sin embargo “hay gente deseosa de poder consumir cultura ya que esta proporciona representación social. Podemos ver dos proyectos en el país que son ejemplos de productos culturales excelentes muy bien mercadeados y consumidos: la Orquesta Sinfónica Nacional y el Festival Credomatic de música, uno estatal y el otro privado”, explica el museólogo.
Para llevar adelante su proyecto, Faith cuenta con un presupuesto para el presente año de ¢200 millones. “Una de las condiciones para aceptar este reto es que existe ese presupuesto y es un reconocimiento que debe hacerse a la ministra de Cultura, María Elena Carballo, por el esfuerzo realizado para obtener un poco más de fondos para esa cartera siempre tan escasa en ese sentido.
La sólida formación del nuevo director y su larga y exitosa trayectoria le permiten conjugar conocimiento, experiencia y talento para realizar una tarea en el MAC que busca no solo frutos inmediatos sino también de mediano y largo plazo.
“No se debe aspirar a eventos de resonancia momentánea sino trabajar en proyectos de trascendencia para los costarricenses”, dice Faith al referirse a los beneficios y los cambios culturales que podrán derivarse del hecho de que los estudiantes cuenten con un museo donde sin dificultad conozcan y comprendan como evolucionó el arte en su país. Pero esto solo se logrará cuando esos niños no vean al museo como un lugar aburrido sino como un espacio entretenido.
A buen paso y sin estridencias
Eduardo Faith en pocas palabras:
* 1981 a 1991: Director Museos del Banco Central
* 1992 a 1994: Museo de los Niños (asesoría en concepción y diseño)
* 1998 a 2000: InBioparque (asesoría en diseño de exposiciones y senderos).
* 2000 a 2003: Director Museo Nacional
* 2002 a 2008: varias asesorías para museografía, diseño y construcción mediante su empresa “Mondrián” en varios países de Centroamérica
* Cursó museología en Escuela del Museo del Louvre, París, Francia, y en Universidad Internacional del Arte Florencia, Italia, entre otros.
Se inicia un proyecto para convertir el Museo de Arte Costarricense en algo atractivo para nacionales y extranjeros. Así lo confirmó su nuevo director, Eduardo Faith, en entrevista con Magazine
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net
Con un plan muy claro y viable para transformar el Museo de Arte Costarricense (MAC) en un lugar apetecido por nacionales y extranjeros, el flamante director de esa entidad, Eduardo Faith Jiménez, llega dispuesto a aprovechar al máximo el tiempo de que dispone.
En el mundo más desarrollado la década de los años 70 marcó la gran explosión del nuevo concepto de museos que logró convertirlos en centro de atracción.
Se invirtió en dotarlos de un glamoroso edificio y luego en exhibir ahí productos apetecidos por la gente desde el arte tradicional hasta novedosas muestras de objetos ligados a la vida cotidiana (como las motocicletas) transformados en arte por medio del diseño.
En Costa Rica el MAC requería con urgencia una transformación por dos razones: para que cumpla realmente con su función y para reparar su infraestructura muy deteriorada en algunos aspectos como sus instalaciones eléctricas, entre otros.
El nuevo director diseñó su plan en tres pasos: el primero, destinado a retirar de ese edificio algunas áreas que serán ubicadas en una nueva instalación cuyo lugar está en estudio.
Este nuevo espacio del MAC será una especie de nave industrial que acoja el sitio destinado al acopio de obras, museografía, servicios técnicos, centro de documentación y oficinas administrativas.
Un segundo paso será reparar y readecuar las instalaciones para utilizarlas únicamente en mantener una exposición que, de manera clara y fácil de captar, evidencie la evolución del arte costarricense y permita a los nacionales reconocerse a sí mismos a través de ella.
Y posteriormente al montaje del nuevo diseño, y a la implementación de servicios de soporte como una cafetería, una tienda y una biblioteca, entre otros, valorar la mejor vía para mercadear en forma adecuada ese producto como valioso bien cultural que es, ofrecido ahora de modo tal que pueda ser apetecido para su consumo en el buen sentido del término por nacionales y extranjeros.
Los grandes museos del mundo han sabido crear un nicho de mercado y en Costa Rica eso no se hizo ni desde el sistema educativo ni desde los museos mismos, explica Faith.
Sin embargo “hay gente deseosa de poder consumir cultura ya que esta proporciona representación social. Podemos ver dos proyectos en el país que son ejemplos de productos culturales excelentes muy bien mercadeados y consumidos: la Orquesta Sinfónica Nacional y el Festival Credomatic de música, uno estatal y el otro privado”, explica el museólogo.
Para llevar adelante su proyecto, Faith cuenta con un presupuesto para el presente año de ¢200 millones. “Una de las condiciones para aceptar este reto es que existe ese presupuesto y es un reconocimiento que debe hacerse a la ministra de Cultura, María Elena Carballo, por el esfuerzo realizado para obtener un poco más de fondos para esa cartera siempre tan escasa en ese sentido.
La sólida formación del nuevo director y su larga y exitosa trayectoria le permiten conjugar conocimiento, experiencia y talento para realizar una tarea en el MAC que busca no solo frutos inmediatos sino también de mediano y largo plazo.
“No se debe aspirar a eventos de resonancia momentánea sino trabajar en proyectos de trascendencia para los costarricenses”, dice Faith al referirse a los beneficios y los cambios culturales que podrán derivarse del hecho de que los estudiantes cuenten con un museo donde sin dificultad conozcan y comprendan como evolucionó el arte en su país. Pero esto solo se logrará cuando esos niños no vean al museo como un lugar aburrido sino como un espacio entretenido.
A buen paso y sin estridencias
Eduardo Faith en pocas palabras:
* 1981 a 1991: Director Museos del Banco Central
* 1992 a 1994: Museo de los Niños (asesoría en concepción y diseño)
* 1998 a 2000: InBioparque (asesoría en diseño de exposiciones y senderos).
* 2000 a 2003: Director Museo Nacional
* 2002 a 2008: varias asesorías para museografía, diseño y construcción mediante su empresa “Mondrián” en varios países de Centroamérica
* Cursó museología en Escuela del Museo del Louvre, París, Francia, y en Universidad Internacional del Arte Florencia, Italia, entre otros.