Podrían retirar billete de 500 euros para evitar delitos y deflación
Bloomberg | Jueves 11 febrero, 2016
Los días del billete de 500 euros podrían estar contados, y no solo porque es el favorito de los delincuentes de todo el mundo.
Mientras el Banco Central Europeo evalúa llevar la tasa para depósitos más por debajo de cero, se encuentra con que coincide con las autoridades que quieren terminar con un medio de evasión fiscal y financiamiento del terrorismo. Si, como plantea el presidente del BCE Mario Draghi, las autoridades abolieran el billete de más valor de la región, también contribuirían a eliminar un importante obstáculo para bajar aún más las tasas de interés.
Unas tasas aún más negativas en algún momento podrían llevar a las entidades de préstamo a retirar dinero de sus cuentas de depósito en el banco central y convertirlo en efectivo en lugar de sufrir pérdidas interminables. En la zona euro, donde el billete de 500 euros significa que el equivalente a mil millones de dólares ocupa solo 3 metros cúbicos, desechar esa denominación haría más difícil guardar grandes cantidades de moneda.
Abolir los billetes de más alta denominación “permitiría reducir aún más el nivel de las tasas de interés nominales porque haría que el almacenamiento de efectivo fuera considerablemente más costoso o difícil”, declaró en entrevista Charles Goodhart, exfuncionario del Banco de Inglaterra y profesor de la London School of Economics. “Hay probabilidades razonables de que podamos fijar un límite superior a la denominación en consonancia con lo que cualquier país respetable debería ofrecer”.
En tanto el Banco de Japón el mes pasado realizó su primera incursión en las tasas de interés negativas, una herramienta estratégica que antes parecía imposible se está convirtiendo en algo habitual en un mundo en el que se han utilizado rebajas convencionales de tasas pero la inflación es débil y el crecimiento, frágil. Si bien las autoridades de Fráncfort pueden ampliar el programa existente de compra de activos de ser necesario, también han dado señales de que están dispuestas a reducir la tasa para depósitos por debajo del actual menos 0,3 por ciento.
Mientras esto tiene lugar, los gobiernos europeos han lanzado una nueva iniciativa para limitar la posibilidad de que los lavadores de dinero, los evasores fiscales y los terroristas utilicen efectivo para sus actividades, en parte impulsados por los atentados ocurridos en París en noviembre.
Una vertiente, propuesta por el Gobierno alemán para consternación del público general, es un límite superior a los pagos en efectivo para toda la UE. El efectivo representa el 80% de los pagos minoristas en Alemania, y la propuesta del Gobierno provocó una airada petición del diario Bild esta semana.
La otra es la abolición del billete de 500 euros.
“Esa es una decisión para el Consejo de Gobierno del BCE”, dijo el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, en una conferencia que tuvo lugar en París el martes. “Ambas cosas buscan el mismo fin, que es restringir las actividades ilegales”.