¡Qué andaba haciendo Francisco Calvo en el área guaraní a los tres minutos!
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Jueves 04 julio, 2024
Siempre tuve la impresión y lo manifesté en esta Nota, que la Selección Nacional no anotaría en la Copa América, salvo que fuera en acción de “bola muerta” o desde el punto de penal.
No me agrada la baja estatura de la zona de ataque, que los limita en el juego aéreo y los pone en desventaja, frente a torres humanas de retaguardias enemigas.
¡Bueno!
Francisco Calvo y Jósimar Alcócer me amarraron el lapicero y pusieron zipper en mi boca, con sus anotaciones en la madrugada del partido frente a Paraguay.
¡Qué andaba haciendo el capitán de la Tricolor en el área guaraní apenas a los tres minutos de acción!
Solo el lo sabrá, pero lo cierto es que metido entre los defensores rivales, pescó de cabeza un centro de Joseph Mora y lo pico al fondo de los cordeles del portero Rodrigo Morinigo.
¡Al carajo mi pronóstico negativo, pero que alegría mirar a los seleccionados festejar finalmente su primera diana!
Cuatro minutos después, Alcócer pega el balón a sus botas y desde la media cancha se enfila al área rival, desbordando paraguayos en una travesía maravillosa digna de un Vinicius Jr. o un Niko Williams.
Jósimar termina la ruta con un remate rastrero, raya quemante que vence la estirada de Morinigo, para un 2-0 sorpresivo e inesperado en el desayuno de la confrontación.
Si ese gol lo ejecuta Messi, Rodrygo, Rafinha, Neymar u otro de los consagrados del planeta fútbol, acapara las portadas de los medios de comunicación del universo, pero Alcócer no es Lautaro Martínez.
Lógicamente Paraguay reaccionó ante el par de contrastes y pasó a dominar las acciones, para probar los reflejos admirables del meta Patrick Sequeira, con parada monumental y varias acciones que sellaron su pasaporte como sucesor de Keylor Navas, quizá para las próximas tres Copas del Mundo y la firmeza de una defensa liderada por Juan Pablo Vargas, retaguardia que reeditó su gran performance ante Brasil.
Gustavo Alfaro cambio el sistema táctico de la Tricolor, que jugó un 5-2-3, dando paso a los laterales Gerard Taylor y Joseph Mora y mantuvo su tripleta de zagueros centrales. Paró un binomio de volantes de marca: Galo y Brenes y un tridente ofensivo con Warren Madrigal, Joel y Alcócer.
Siempre nos ha gustado y lo hemos escrito mil veces ver a Campbell como 9 y no escondido en los costados. Alcócer es potente y Madrigal inteligente.
Quizá en un grupo menos complicado, Costa Rica hubiese clasificado. En todo caso: misión cumplida.
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