¿Qué le pasa a Saprissa?
Cristian Williams cwilliams@larepublica.net | Martes 25 septiembre, 2012
¿Qué le pasa a Saprissa?
Los morados dejaron el protagonismo de las primeras fechas para ser uno más en el torneo
Un arranque prometedor, con golpes de autoridad, marcando la cancha, ganando en casa y de visita, logrando el 87% de rendimiento en los primeros cinco partidos (13 puntos de 15), se vino abajo como un naipe.
Ahora Saprissa no asusta, vive de la renta, ya que en los siguientes seis partidos apenas ha sumado cinco unidades, para un pobre rendimiento del 27%. ¿Qué le pasó al equipo de Daniel Casas?
Portería inestable
En los primeros cinco partidos Saprissa recibió solo dos goles, uno de ellos autogol. Víctor Bolívar andaba bien, pero luego todo cambió, y en los siguientes seis encuentros lo han perforado nueve veces.
No es todo culpa del arquero, pero ante Santos y Limón, sendas derrotas, su actuación fue deficiente.
Laterales sin proyección
Aunque en el centro de la zaga los morados han mostrado buenas cosas, sobre todo cuando juegan Gabriel Badilla y Douglas Sequeira, no tanto Oscar Duarte, en las bandas son nulos.
Jordan Smith y el uruguayo Juan Manuel Morales no pasan el mejor momento, al punto que al uruguayo hasta reemplazo le trajeron de Belén. Un equipo sin laterales que sumen en ofensiva está liquidado y eso pasa en Saprissa.
¿Dónde está Cancela?
Saprissa cambió a Walter Centeno por José Carlos Cancela y está perdiendo. El uruguayo brilló en las primeras jornadas, anotó de tiro libre y de penal, luego bajó nivel y se lesionó.
Con su salida el equipo se vino abajo, lo mismo que al sentar a Juan Bustos. Ninguno de los llamados a brillar lo ha logrado, ni Manfred Russell, Mauricio Castillo, José Luis Cordero, etcétera.
Delantera nula
Si el goleador de Saprissa es su defensa central, Douglas Sequeira, y la contratación más sonada y llamado a ser romperredes, el brasileño Ricardo Costa, no lleva ni un gol, ningún equipo puede ganar.
Hay que sumarle que por más variantes ninguno está con gol, ni Jorge Castro, ni Daniel Colindres, ni César Elizondo. La esperanza es la llegada de Ariel Rodríguez.
Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net
Los morados dejaron el protagonismo de las primeras fechas para ser uno más en el torneo
Un arranque prometedor, con golpes de autoridad, marcando la cancha, ganando en casa y de visita, logrando el 87% de rendimiento en los primeros cinco partidos (13 puntos de 15), se vino abajo como un naipe.
Ahora Saprissa no asusta, vive de la renta, ya que en los siguientes seis partidos apenas ha sumado cinco unidades, para un pobre rendimiento del 27%. ¿Qué le pasó al equipo de Daniel Casas?
Portería inestable
En los primeros cinco partidos Saprissa recibió solo dos goles, uno de ellos autogol. Víctor Bolívar andaba bien, pero luego todo cambió, y en los siguientes seis encuentros lo han perforado nueve veces.
No es todo culpa del arquero, pero ante Santos y Limón, sendas derrotas, su actuación fue deficiente.
Laterales sin proyección
Aunque en el centro de la zaga los morados han mostrado buenas cosas, sobre todo cuando juegan Gabriel Badilla y Douglas Sequeira, no tanto Oscar Duarte, en las bandas son nulos.
Jordan Smith y el uruguayo Juan Manuel Morales no pasan el mejor momento, al punto que al uruguayo hasta reemplazo le trajeron de Belén. Un equipo sin laterales que sumen en ofensiva está liquidado y eso pasa en Saprissa.
¿Dónde está Cancela?
Saprissa cambió a Walter Centeno por José Carlos Cancela y está perdiendo. El uruguayo brilló en las primeras jornadas, anotó de tiro libre y de penal, luego bajó nivel y se lesionó.
Con su salida el equipo se vino abajo, lo mismo que al sentar a Juan Bustos. Ninguno de los llamados a brillar lo ha logrado, ni Manfred Russell, Mauricio Castillo, José Luis Cordero, etcétera.
Delantera nula
Si el goleador de Saprissa es su defensa central, Douglas Sequeira, y la contratación más sonada y llamado a ser romperredes, el brasileño Ricardo Costa, no lleva ni un gol, ningún equipo puede ganar.
Hay que sumarle que por más variantes ninguno está con gol, ni Jorge Castro, ni Daniel Colindres, ni César Elizondo. La esperanza es la llegada de Ariel Rodríguez.
Cristian Williams
cwilliams@larepublica.net