Reserva Federal reitera a Trump: eleve la productividad
Bloomberg | Martes 22 noviembre, 2016
El consejo de la Reserva Federal envió un mensaje al presidente electo Donald Trump sobre la economía de Estados Unidos, reiterado el lunes por el vicepresidente del banco central, Stanley Fischer, es claro como el agua: use el poder del erario público para hacer que los trabajadores estadounidenses sean más productivos.
Las declaraciones de Fischer se hacen eco de comentarios similares realizados la semana pasada por la presidenta de la Fed, Janet Yellen, y el presidente de la Fed de Nueva York, William Dudley, que recalcaban el mensaje de que el estímulo fiscal debía ser diseñado no solo para darle a la economía un impulso a corto plazo, sino también para responder a una tendencia a mayor plazo que parece estar debilitando el crecimiento de las economías desarrolladas.
Fischer también dijo que la economía de Estados Unidos estaba otra vez cerca de las metas del banco central sobre empleo e inflación, reforzando el mensaje de que la Fed seguramente elevará las tasas de interés en su reunión del 13 y 14 de diciembre en Washington.
Los inversionistas otorgan una probabilidad del 98% a que en esa cita se eleven las tasas en un cuarto de punto porcentual.
“La inquietud por la economía refleja un número de retos a mayor plazo, retos que requerirán herramientas de política distintas a las utilizadas para responder a los déficits cíclicos al crecimiento de menor plazo”, dijo Fischer al Consejo de Relaciones Exteriores en Nueva York.
A pesar de años de tasas de interés bajas récord, la economía sigue luchando con un crecimiento lento. Se prevé que el producto interno bruto en Estados Unidos se expanda solo un 1,6% este año, según un sondeo de Bloomberg a 72 analistas.
Inversión en infraestructura
La productividad y los estándares de vida, agregó Fischer, podrían elevarse a través de inversiones en infraestructura y educación, así como con políticas que alienten la inversión privada y mejoren la regulación. Ello, añadió, podría ayudar a atender la preocupación de muchos bancos centrales de que los gobiernos se han apoyado demasiado en políticas monetarias sin añadir estímulo fiscal para impulsar el crecimiento en años recientes.
Fischer advirtió, sin embargo, que los funcionarios necesitan ser cautelosos sobre las medidas fiscales en momentos en que el desempleo se ubicaba por debajo del 5% y la deuda federal ya era elevada.
“Estamos muy cerca al empleo total”, dijo Fischer. “No tenemos mucho margen para aumentar el déficit sin consecuencias adversas a largo plazo”.
En respuesta a preguntas, Fischer señaló que no estaba preocupado por el desplome en los precios de los bonos desde la sorpresiva victoria de Trump el 8 de noviembre. El rendimiento de los bonos del Tesoro a diez años ha subido casi medio punto porcentual.
No inusual
“Cuarenta puntos base es mucho, pero no es tan inusual”, dijo. “Aún tenemos tasas de interés a largo plazo bajas”.
Fischer también indicó que Yellen y el Comité Federal de Mercado Abierto, aunque han hablado con frecuencia sobre atraer más estadounidenses a la fuerza laboral, no tolerarían un desequilibrio significativo de la inflación.
Tanto Yellen, en testimonio en el Congreso el 17 de noviembre, como Dudley, en declaraciones a reporteros el 18 de noviembre, dijeron que las autoridades y la Casa Blanca deberían concentrarse en elevar la productividad. Como Yellen, Fischer se refirió a que datos que muestran crecimiento en la productividad —la tasa a la que la productividad por hora está creciendo— ha sido reducida a la mitad desde 2006 comparado con el promedio desde la Segunda Guerra Mundial.
“La reducción a la mitad del crecimiento en productividad, si persiste, tendría consecuencias expansivas sobre los estándares de vida, crecimiento del salario y política económica”, dijo Fischer.