STEM y las Universidades
Ana Isabel Solano Brenes anaisolano@gmail.com | Miércoles 28 julio, 2021
La Educación Superior tiene un enorme impacto en el desarrollo nacional, y un reto en esta nueva realidad para formar los profesionales que requerirá el trabajo del futuro.
Sin duda alguna la pandemia mundial del Covid-19 adelantó el futuro y aceleró los cambios que se tenían previstos, uno de ellos es precisamente el futuro del trabajo.
Los nuevos desafíos del país demandan a las Universidades graduados con perfiles más especializados con mayores conocimientos para enfrentar los constantes cambios científicos y tecnológicos.
Recientemente el Foro Económico Mundial dio a conocer un informe sobre "El futuro del trabajo 2020", que analiza los efectos sobre el empleo y la aceleración de la digitalización causada por el Covid-19. Algunas de las principales conclusiones de este informe se destacan la página de Santander
• “La automatización junto con la actual recesión de COVID-19 está creando una 'doble disrupción' para los trabajadores: el informe estima que “para 2025, la automatización y la nueva división del trabajo entre humanos y máquinas afectará a 85 millones de puestos de trabajo en todo el mundo, creándose 97 millones de nuevas funciones, a través de la creciente demanda de trabajadores para puestos de trabajo en la economía verde y digital (relacionados con la economía de datos, inteligencia artificial, computación en la nube...).
• El informe también destaca la importancia del factor humano en algunos trabajos: Aquellos trabajos en los que “los seres humanos están llamados a conservar su ventaja competitiva” frente a las máquinas, como pueden ser los trabajos relacionados con el cuidado de las personas; funciones de marketing, ventas y producción de contenido, así como funciones relacionadas con la gestión, el asesoramiento, la toma de decisiones, el razonamiento, la comunicación y la interacción personal.
• En este mercado laboral tan cambiante, el papel de la formación continua y la mejora de competencias está ganando relevancia. Según el informe, para 2025, “el 44% de las competencias que los empleados necesitarán para desempeñar sus funciones de manera eficaz cambiarán”. El estudio señala que "en promedio, las empresas estiman que alrededor del 40% de los trabajadores requerirán una recapacitación de seis meses o menos y el 94% de los líderes empresariales informan que esperan que los empleados adquieran nuevas habilidades en el trabajo”.
• Como conclusión final, el informe advierte que "en ausencia de esfuerzos proactivos, es probable que la desigualdad se vea agravada por el doble impacto de la tecnología y la recesión económica del Covid-19".
Estas conclusiones deben ser de estudio obligado por parte de las Universidades para definir las estrategias de adaptación en la formación de los futuros profesionales, una de estas es la enseñanza en CTIM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas) STEM (por sus siglas en inglés es el acrónimo de los términos en inglés Science, Technology, Engineering and Mathematics)
¿Por qué se asocia la educación STEM con la nueva realidad? ¿Qué es la educación STEM?
“ STEM es un enfoque que integra contenidos matemáticos y científicos utilizando el proceso de diseño de la ingeniería, con el fin de desarrollar a través del trabajo en equipo y el uso de la tecnología soluciones a problemas del mundo, es una nueva tendencia educativa que promete arraigarse en los centros educativos en un futuro próximo. Una educación STEM se centra en la enseñanza de estas áreas, no solo para enseñar los conocimientos, sino también para su aplicación práctica en el día a día. Al ser disciplinas que aparecen en acciones diarias los estudiantes asimilan mucho mejor su conocimiento. Todas las disciplinas que lo forman se relacionan entre sí, permitiendo un enfoque mucho más global. Lo que pretende este tipo de educación es que las nuevas generaciones estén preparadas para la innovación y la investigación. No dejan atrás la teoría, pero estos conocimientos les preparan para resolver problemas reales y enfrentarse a los retos del futuro.
La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) destaca en uno de sus informes del año 2020 la necesidad de una reforma integral que tenga en cuenta esta nueva realidad y que responda a las aspiraciones del país y de la necesidad de disponer de mecanismos para aumentar los graduados en STEM, este informe cita textualmente:
“Una preocupación particular es la inercia excesiva en las universidades costarricenses, que continúan estando muy sesgadas hacia las ciencias sociales y las humanidades, produciendo pocos graduados en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas …”
“La reducción de los desajustes en las competencias requiere acciones paralelas de oferta y demanda. Por el lado de la oferta, es necesario mejorar la gestión de las universidades para que respondan más por sus decisiones, se basen en el rendimiento y respondan a las necesidades de habilidades que hay en Costa Rica. “
Según este mismo informe solo un 15% de los graduados siguen carreras en STEM.
Además de este reto disruptivo para fomentar en las Universidades las carreras en STEM, existe otro gran desafío pues según el informe del Estado de Educación publicado en el año 2019, “las brechas de género persisten en algunas áreas de conocimiento, según los datos de las universidades públicas, que son los disponibles. En carreras como Física, Computación, Ingeniería Mecánica, Ingeniería Electrónica e Ingeniería Eléctrica, más del 80% de la matrícula corresponde a hombres”, por lo tanto, se deben que realizar y fomentar las acciones necesarias para que al tiempo que promuevan las carreras en este campo, se logre incorporar un mayor número de mujeres.
Las Universidades además de propiciar, deben apoyar todas aquellas acciones que fortalezcan la enseñanza STEM y coadyuven a la incorporación de las mujeres. Iniciativas como las que promueve actualmente el Consejo Nacional para Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT), y la Fundación Costa Rica Estados Unidos para la Cooperación (CRUSA) en alianza con la incubadora Impact Hub San José y con el acompañamiento de Spyre Group, que en conjunto han propuesto el programa CONSTELAR, incentivan a las mujeres del país a generar ideas de negocio en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas , sin duda constituyen un importante apoyo para promover, facilitar y fortalecer la participación de las mujeres en la ruta del STEM, un proyecto muy valioso y en la dirección correcta que como país debemos reconocer y apoyar.
Las Universidades tienen por delante el reto de atender las necesidades de formación del recurso humano que demanda el futuro próximo en esta nueva realidad y que responda a las aspiraciones del país, abordar estos cambios requerirá de un enfoque planificado y estratégico de la gobernanza en la Educación Superior. Según el Foro Económico Mundial las profesiones en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM) dominan la lista de los 10 empleos que tendrán mayor demanda laboral en los próximos cinco años. La necesidad de invertir en nuevas tecnologías, la urgencia de dar una prioridad a la educación STEM será determinante y un motor insustituible para el desarrollo de nuestro país.