Subsidios pesan sobre tasas en banca de desarrollo
Wilmer Murillo wmurillo@larepublica.net | Jueves 26 junio, 2008
Créditos pagarán solo la mitad de tasa básica en colones y la Libor en dólares
Subsidios pesan sobre tasas en banca de desarrollo
• El nuevo esquema podría estar operando a toda capacidad en enero
• Se inició proceso para depurar listas de deudores
Wilmer Murillo
wmurillo@larepublica.net
El programa de banca de desarrollo que empezaría a operar plenamente en enero, otorgará subsidios a través de las tasas de interés.
Los créditos para desarrollo deben pagar solo la mitad de la tasa básica pasiva (actualmente en 5,50%) más 4,5 puntos porcentuales en colones, y la mitad de la tasa Libor más un 3% en dólares.
El programa exigirá un mayor esfuerzo financiero pues aparte de cobrar tasas de interés más bajas, conlleva la obligación de aprovisionar reservas de capital equivalentes a un 15% de la cartera de préstamos de dudosa recuperación.
Desde el punto de vista prudencial la banca de desarrollo recibirá una supervisión diferenciada de los reguladores. No obstante, cada operación de crédito para desarrollo, tiene que ser viable y factible.
Adicionalmente los bancos deben disponer de un margen adecuado o racional para pagar la infraestructura que la banca de desarrollo demanda.
Pese a los subsidios, los créditos de desarrollo estarán bajo la lupa de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) que aplicará los procesos de Basilea, que tienen que ver con riesgos de crédito, de imagen, financieros y operativos.
Los bancos que participan en el programa desarrollo, y sobre todo Bancrédito, a cuyo cargo están todos los recursos creados por ley en los próximos cinco años, “tienen un reto titánico para hacer sujetos de crédito mediante avales y garantías al 65% de los ticos”, dijo Guillermo Quesada, gerente general.
“Nos exigirá un esfuerzo muy grande, apoyar un amplio sector del país que no tiene acceso a la banca tradicional, a fin de que sean empresarios exitosos en el país y a nivel internacional”, adujo el funcionario bancario.
Bancrédito está a menos de cinco meses de poder coordinar y dar a conocer un plan para canalizar recursos para micro, pequeños y medianos empresarios, y acompañarlos con planes de apoyo especial.
Con ese fin, tras la vigencia de la ley, Bancrédito, inició un proceso para depurar las listas de deudores del “megafideicomiso”, creado por ley el pasado 7 de mayo.
El Banco dispondrá por la unión de varios fideicomisos de $80 millones que conforman el denominado Fondo Nacional para el Desarrollo (Fonade).
Como administrador del programa, Bancrédito contará además con alrededor de $134,6 millones procedentes del 17% de las cuentas corrientes de los bancos privados, lo cual se conoce como “peaje bancario”.
Adicionalmente, cada banco público, incluido el Popular, aportará el 5% de sus beneficios para el programa. De conformidad con las ganancias de 2007, ese monto rondaría $11,5 millones anuales.
Poner a punto el programa, le corresponde a un consejo rector, integrado por Marco Vargas, ministro de Economía; Javier Flores, ministro de Agricultura; William Hayden, gerente del Banco Nacional y representantes de la Unión de Cámaras.
Bajo esta supervisión se iniciaron auditorías de las carteras de los fideicomisos, la situación de los proyectos, créditos en cobro judicial, cobro administrativo y solicitudes pendientes y determinar cuáles proyectos son factibles.
“Debemos preparar un informe este año con todas las definiciones técnicas, para someterlo a un escrutinio antes de que se pueda empezar a aplicar en enero de 2009”, añadió Quesada.
Subsidios pesan sobre tasas en banca de desarrollo
• El nuevo esquema podría estar operando a toda capacidad en enero
• Se inició proceso para depurar listas de deudores
Wilmer Murillo
wmurillo@larepublica.net
El programa de banca de desarrollo que empezaría a operar plenamente en enero, otorgará subsidios a través de las tasas de interés.
Los créditos para desarrollo deben pagar solo la mitad de la tasa básica pasiva (actualmente en 5,50%) más 4,5 puntos porcentuales en colones, y la mitad de la tasa Libor más un 3% en dólares.
El programa exigirá un mayor esfuerzo financiero pues aparte de cobrar tasas de interés más bajas, conlleva la obligación de aprovisionar reservas de capital equivalentes a un 15% de la cartera de préstamos de dudosa recuperación.
Desde el punto de vista prudencial la banca de desarrollo recibirá una supervisión diferenciada de los reguladores. No obstante, cada operación de crédito para desarrollo, tiene que ser viable y factible.
Adicionalmente los bancos deben disponer de un margen adecuado o racional para pagar la infraestructura que la banca de desarrollo demanda.
Pese a los subsidios, los créditos de desarrollo estarán bajo la lupa de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) que aplicará los procesos de Basilea, que tienen que ver con riesgos de crédito, de imagen, financieros y operativos.
Los bancos que participan en el programa desarrollo, y sobre todo Bancrédito, a cuyo cargo están todos los recursos creados por ley en los próximos cinco años, “tienen un reto titánico para hacer sujetos de crédito mediante avales y garantías al 65% de los ticos”, dijo Guillermo Quesada, gerente general.
“Nos exigirá un esfuerzo muy grande, apoyar un amplio sector del país que no tiene acceso a la banca tradicional, a fin de que sean empresarios exitosos en el país y a nivel internacional”, adujo el funcionario bancario.
Bancrédito está a menos de cinco meses de poder coordinar y dar a conocer un plan para canalizar recursos para micro, pequeños y medianos empresarios, y acompañarlos con planes de apoyo especial.
Con ese fin, tras la vigencia de la ley, Bancrédito, inició un proceso para depurar las listas de deudores del “megafideicomiso”, creado por ley el pasado 7 de mayo.
El Banco dispondrá por la unión de varios fideicomisos de $80 millones que conforman el denominado Fondo Nacional para el Desarrollo (Fonade).
Como administrador del programa, Bancrédito contará además con alrededor de $134,6 millones procedentes del 17% de las cuentas corrientes de los bancos privados, lo cual se conoce como “peaje bancario”.
Adicionalmente, cada banco público, incluido el Popular, aportará el 5% de sus beneficios para el programa. De conformidad con las ganancias de 2007, ese monto rondaría $11,5 millones anuales.
Poner a punto el programa, le corresponde a un consejo rector, integrado por Marco Vargas, ministro de Economía; Javier Flores, ministro de Agricultura; William Hayden, gerente del Banco Nacional y representantes de la Unión de Cámaras.
Bajo esta supervisión se iniciaron auditorías de las carteras de los fideicomisos, la situación de los proyectos, créditos en cobro judicial, cobro administrativo y solicitudes pendientes y determinar cuáles proyectos son factibles.
“Debemos preparar un informe este año con todas las definiciones técnicas, para someterlo a un escrutinio antes de que se pueda empezar a aplicar en enero de 2009”, añadió Quesada.