Préstamo por $550 millones para financiar plan genera dudas
Tren eléctrico podría descarrilarse
Contener gasto es una tarea pendiente del Gobierno, según diputados
Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Martes 03 diciembre, 2019
La concesión de un tren eléctrico eficiente y moderno que conecte a las cuatro provincias de la GAM podría descarrilarse por culpa de los diputados antes de echar a andar.
Las principales bancadas legislativas -que suman 40 diputados- ven con escepticismo el costo del proyecto de $1.235 millones, incluyendo un préstamo por $550 millones con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), además de una millonaria contrapartida del Estado.
Se trata de Liberación Nacional, Unidad Social Cristiana, Nueva República y Restauración Nacional, quienes definirían con sus votos el éxito o fracaso del plan.
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El hecho de que el país atraviese por problemas fiscales y que no se haya contenido el gasto, según el criterio de los legisladores, pone en duda el principal proyecto de movilidad urbana que ha propuesto el Gobierno de Carlos Alvarado.
Incluso, Carmen Chan, jefa de Nueva República, calificó el proyecto como “ilusorio”, mientras que Gustavo Viales, de Liberación, cuestionó el compromiso del Gobierno para contener el gasto y lo acusó de seguir despilfarrando.
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La meta del presidente es dejar concesionada la obra en 2022; por ello, presentará en el primer trimestre del 2020 un proyecto de ley que estructura el préstamo, confirmó Elizabeth Briceño, presidenta ejecutiva del Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer), a LA REPÚBLICA.
El tren que planea el Gobierno es de 73 kilómetros, a lo largo de 15 cantones y cuatro provincias. Sería bidireccional, a ras de suelo y con algunos pasos elevados. La idea es que tenga una frecuencia de cada cinco minutos y que no requiera expropiaciones.
La obra será concesionada y hasta el momento, empresas de diez países han mostrado interés.
En principio permitiría la contratación de 1.000 empleados temporales para las actividades de construcción y generaría unos 461 empleos fijos para la etapa de operación.
La propuesta ayudaría a disminuir las presas y la contaminación, además de darle mayor calidad de vida a los costarricenses al reducir los embotellamientos, por lo que cuenta con el respaldo del BCIE y la Unión Europea.
Radiografía
El objetivo del Gobierno es dejar concesionado el tren en esta administración.
El costo del plan superaría los $1.235 millones; de los cuales, unos $550 millones serían parte de un préstamo y el resto sería financiado por el Estado.
Plan ambicioso
El tren eléctrico interurbano que planea el Gobierno sería el centro de un transporte público moderno y ordenado; sin embargo, el proyecto está en duda porque los diputados de oposición no estarían dispuestos a aprobar un crédito por $550 millones para impulsarlo.
A favor
Carlos Alvarado
Presidente
Costa Rica
El tren es un proyecto transformador que cambiará la vida de miles de personas en Costa
Rica, tiene beneficios en tiempos de traslados, reducción de costos a las personas y al país, mejoras en
salud y en la calidad del aire; así como en reducir las emisiones de carbono del país.
El plan conectaría las cuatro provincias de la Gran Área Metropolitana y uniría a 15 cantones a lo largo de
73 kilómetros
Elizabeth Briceño
Presidenta Ejecutiva
Instituto Costarricense de Ferrocarriles
No se trata solo de la concesión de un tren, sino de la base de todo un sistema de
transporte público que traerá múltiples beneficios para los ciudadanos al incluir a los buses, taxis y otros
sistemas.
Menos contaminación, reducción de costos en el transporte, mejor calidad de vida y una disminución de las
presas son algunos de los beneficios del proyecto.
Nosotros nos hemos reunido con los jefes de fracción de varios partidos y ellos han manifestado su interés
en el proyecto por lo que representa, entiendo que es un proyecto país.
Dante Mossi
Presidente Ejecutivo
Banco Centroamericano de Integración Económica
Es un proyecto que marca el inicio de los planes ferroviarios a la región y que, además, es amigable con el ambiente al ser un tren eléctrico en un país donde la mayoría de la energía eléctrica es renovable, y que servirá como modelo para los otros proyectos similares en la región.
Con dudas
Carmen Chan
Jefa de fracción
Nueva República
Es evidente que la agenda del Gobierno retrata la forma en que el presidente Carlos
Alvarado utiliza las facultades institucionales para hacer un traje a la medida, que favorezca o lleve algún
rédito a su disminuida imagen. En este caso, utilizando el tren.
Con ese ilusorio intento del tren eléctrico, el proyecto que extermina las huelgas, la iniciativa de
transformación de Recope y los eurobonos, el presidente y su Gobierno quisieran congraciarse únicamente con
los intereses de los grupos aliados a su proyecto político, sin voluntad de responder a los intereses de los
sectores más necesitados.
Eduardo Cruickshank
Jefe de fracción
Restauración Nacional
Mientras se mantenga una visión vallecentralista no se podrán resolver los problemas de
movilidad, ya que es cada vez más la gente que viene de la periferia a la GAM.
En ese sentido, el tren eléctrico es un proyecto caro que endeuda al país más y que solo mitigaría el asunto
de las presas por un tiempo.
La fracción de Restauración no está dispuesta a seguir financiando todo con más deuda, sobre todo, cuando ya
más del 50% del presupuesto es deuda.
María Inés Solís
Jefa de fracción
Unidad Social Cristiana
Tenemos que conocer todavía cuál es el plan, cuál es la letra menuda del empréstito que
está pidiendo el Gobierno al Banco Centroamericano de Integración Económica para el tren eléctrico, por lo
que pienso que es un poco prematuro hablar del tema.
Hay que hacer las indagaciones del caso, recordemos que el PUSC siempre ha sido muy minucioso con el gasto
del Gobierno y los empréstitos y esta no va a ser la excepción.
Gustavo Viales
Diputado
Liberación Nacional
Nos parece que el Poder Ejecutivo debe empezar ya una clara, consistente y firme señal de
contención del gasto público.
Esta Asamblea Legislativa ha sido consciente de la necesidad del país en cuanto a cobrar nuevos impuestos,
pero también en la regulación del gasto y los eurobonos.
En ese sentido, me parece que seguir endeudándonos sin ninguna proyección de atención al gasto es
contradictorio, aun cuando se trate del tren.