Trump propone plan de deportación similar al de Obama
Bloomberg | Jueves 25 agosto, 2016
Donald Trump se está alejando de su llamado a realizar deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados, y algunos de sus seguidores parecen no tener problema con eso.
Si gana la elección de noviembre, dijo el candidato republicano a la presidencia, hará "lo mismo" que Barack Obama al priorizar la expulsión de criminales que residen en Estados Unidos de manera ilegal, pero "quizás, con mucha más energía".
Pareciera que Trump está prestando atención al consejo que le dan algunos de sus aliados en cuanto a suavizar su postura en relación con las deportaciones, asunto que temen resulte tóxico para el voto hispano ahora que se enfrenta a la demócrata Hillary Clinton y a las alarmantes cifras de las encuestas, a tan solo 80 días de la elección general.
Su nueva actitud crispó a algunos conservadores, que lo tomaron como un paso hacia una amnistía, pero aún no está claro si este intento por conseguir un mayor número de simpatizantes lo hará perder a muchos de sus principales seguidores.
"Vamos a obedecer las leyes actuales. Las leyes vigentes son muy fuertes", dijo Trump en Fox News. "Lo primero que haremos, si y cuando gane, es que nos vamos a deshacer de todos los malos. Tenemos pandilleros, asesinos, tenemos a mucha gente mala que debemos sacar de este país", agregó.
"Respecto a los demás, lo haremos a través del proceso", dijo Trump. "Lo que la gente no sabe es que Obama sacó a mucha gente del país, Bush también. Mucha gente salió del país con las leyes vigentes. Bueno, nosotros haremos lo mismo", acotó.
Obama ha deportado a más personas que cualquier otro presidente de Estados Unidos, lo cual lo ha hecho merecedor del título de "Jefe de deportaciones" por parte de un defensor de los derechos del migrante. En 2014, Obama anunció acciones ejecutivas para destinar recursos a la deportación de criminales, sospechosos de terrorismo y de quienes son atrapados intentando cruzar la frontera, al mismo tiempo que facilitó el proceso para las personas indocumentadas que habían vivido en Estados Unidos por años sin haber cometido delito alguno. La otra parte del plan de Obama: permisos de trabajo para gente joven y padres de ciudadanos estadounidenses, fue bloqueada en los tribunales.
La alineación de Trump con el plan de Obama sobre las deportaciones, es una desviación de la declaración republicana de hace un año en la que se dijo que los 11 millones de personas indocumentadas en Estados Unidos "tenían que irse" y que una "fuerza de deportación" podría hacer el trabajo en tan solo dos años.