Un "bolilápiz" novedoso
Carmen Juncos cjuncos@larepublica.net | Lunes 30 agosto, 2010
Con Sumo
Un “bolilápiz” novedoso
Los innovadores no se cansan de idear y llevar a la práctica nuevos productos. Algunos de ellos, se vuelven rápidamente de uso común. No se si eso ocurrirá con el nuevo “bolilápiz” (el nombre es mío, no de la marca que lo inventó), pero se me ocurre que podría ser famoso en poco tiempo.
Se trata de un lápiz líquido, de la marca Sharpie, que según parece llegará al mercado el mes entrante. Este escribe de forma suave, en un color intermedio entre el negro de un bolígrafo y el gris de un lápiz, pero lo interesante es que sus trazos se pueden borrar y solo se vuelven inalterables si transcurren tres días después de haber escrito algo.
Aunque hoy casi todo se hace con una computadora, no hay duda que a la hora de utilizar un bolígrafo, muchos preferirán el que se puede borrar. Habrá que ver si el precio es competitivo pero, de ser así, casi seguro que a los estudiantes les vendría bien disponer de un trazo semejante al del bolígrafo que puedan borrar cuantas veces quieran si se equivocan.
El novedoso lápiz líquido de Sharpie podría ofrecer los beneficios de no tener que sacarle punta al lápiz y escribir con un trazo líquido y más oscuro.
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net
Un “bolilápiz” novedoso
Los innovadores no se cansan de idear y llevar a la práctica nuevos productos. Algunos de ellos, se vuelven rápidamente de uso común. No se si eso ocurrirá con el nuevo “bolilápiz” (el nombre es mío, no de la marca que lo inventó), pero se me ocurre que podría ser famoso en poco tiempo.
Se trata de un lápiz líquido, de la marca Sharpie, que según parece llegará al mercado el mes entrante. Este escribe de forma suave, en un color intermedio entre el negro de un bolígrafo y el gris de un lápiz, pero lo interesante es que sus trazos se pueden borrar y solo se vuelven inalterables si transcurren tres días después de haber escrito algo.
Aunque hoy casi todo se hace con una computadora, no hay duda que a la hora de utilizar un bolígrafo, muchos preferirán el que se puede borrar. Habrá que ver si el precio es competitivo pero, de ser así, casi seguro que a los estudiantes les vendría bien disponer de un trazo semejante al del bolígrafo que puedan borrar cuantas veces quieran si se equivocan.
El novedoso lápiz líquido de Sharpie podría ofrecer los beneficios de no tener que sacarle punta al lápiz y escribir con un trazo líquido y más oscuro.
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net