Un chispazo, un golazo
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Lunes 20 agosto, 2012
Un chispazo, un golazo
A Alvaro Sánchez le bastó una jugada para definir el partido
Una acción de individual de Alvaro Sánchez, en su reaparición con la Liga, fue suficiente para sentenciar un partido (0-1) que para ese entonces los manudos ya deberían ir perdiendo, y en el que Sánchez no había sumado ni restado. No obstante, Alvaro demostró que cuando se tiene talento, tan solo basta esperar la oportunidad.
El partido gustó porque hubo entrega y acciones de gol en ambos marcos, aunque a los guerreros del sur les quedó el sabor amargo de que por mucho, su falta de definición fue el principal motivo de que resultaran derrotados.
Durante buena parte del juego, Alajuelense pareció ir por el mismo camino que le deparó el 0-0 contra Limón, en la quinta fecha. Sánchez no aparecía, Gabas no hacía diferencia, Meneses se asomaba poco por su carril y Salvatierra y Sancho no hacían yunta por la derecha; delante de ellos un Anderson Andrade lleno de voluntad pero con cierta torpeza a la hora de parar, transportar y pasar el balón. Después de los tres cuartos de cancha, Alajuelense no se veía bien.
Pérez Zeledón, mientras tanto, jugaba su partido y buscaba crear opciones con un Mudarra muy activo por la izquierda, Juan Diego Monge y Camilo Aguirre presionando por el centro, mientras Luis Stewart Pérez hacia de las suyas por la derecha.
Jafeth Soto planeó un primer tiempo para salirlo ganando, pero sus jugadores no le respondieron. Veamos.
Al 19, tiro libre para el Pérez; Ariel Rodríguez la pasa por encima de la barrera y por detrás recibe Mudarra, hasta ahí perfecta la jugada de pizarra, pero el remate del generaleño fue bloqueado en acción salvadora de Pemberton.
La segunda fue una bola que Pérez le quita a Meneses, avanza hacia el área atrayendo toda la atención de la defensa manuda que deja solo a Camilo; Stewart inteligente toca, pero Aguirre quiso ‘cucharear’ a lo Messi y no le salió, la pelota pasó por encima del horizontal, mientras Jafeth, en el banquillo, pensaba que debía ir ganando 2-0.
La tercera fue al 43’, con un remate de Juan Diego Monge que Pemberton desvió en forma espectacular con su mano izquierda, ratificando su buena actuación, empero la pelota le quedó a Luis Pérez, quien la “cuchareó” muy suave y Palma logró salvarla en la línea. Definitivamente les faltó “cuchara” a estos guerreros.
En la complementaria el partido no varió mucho. La Liga, con un buen trabajo de Juan Gabriel Guzmán y luego el ingreso de Kenneth García, buscaba su opción apostando sobre todo a la bola muerta, ante su dificultad de coordinación cuando se acercaban al marco pezetero.
No obstante, la acción del gol, al 77, fue una muy buena jugada; una bola que recupera Sancho en las puertas del área, hace un sombrero y se la pone a Sánchez, quien a pura izquierda; dos toquecitos, sombrero a Robert Arias, y remate potente al ángulo derecho de Adrián de Lemos, le puso números definitivos al partido.
Después de eso, la Liga se echó a defender la anotación y Pérez solo tuvo una oportunidad más en bola muerta, cobra Ariel Rodríguez, Francisco Calvo se adelanta, sorprende a la defensa visitante, pero le queda en la de ‘palo’ y su disparo va suave a las manos de Pemberton.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
A Alvaro Sánchez le bastó una jugada para definir el partido
El partido gustó porque hubo entrega y acciones de gol en ambos marcos, aunque a los guerreros del sur les quedó el sabor amargo de que por mucho, su falta de definición fue el principal motivo de que resultaran derrotados.Durante buena parte del juego, Alajuelense pareció ir por el mismo camino que le deparó el 0-0 contra Limón, en la quinta fecha. Sánchez no aparecía, Gabas no hacía diferencia, Meneses se asomaba poco por su carril y Salvatierra y Sancho no hacían yunta por la derecha; delante de ellos un Anderson Andrade lleno de voluntad pero con cierta torpeza a la hora de parar, transportar y pasar el balón. Después de los tres cuartos de cancha, Alajuelense no se veía bien.
Pérez Zeledón, mientras tanto, jugaba su partido y buscaba crear opciones con un Mudarra muy activo por la izquierda, Juan Diego Monge y Camilo Aguirre presionando por el centro, mientras Luis Stewart Pérez hacia de las suyas por la derecha.
Jafeth Soto planeó un primer tiempo para salirlo ganando, pero sus jugadores no le respondieron. Veamos.
Al 19, tiro libre para el Pérez; Ariel Rodríguez la pasa por encima de la barrera y por detrás recibe Mudarra, hasta ahí perfecta la jugada de pizarra, pero el remate del generaleño fue bloqueado en acción salvadora de Pemberton.
La segunda fue una bola que Pérez le quita a Meneses, avanza hacia el área atrayendo toda la atención de la defensa manuda que deja solo a Camilo; Stewart inteligente toca, pero Aguirre quiso ‘cucharear’ a lo Messi y no le salió, la pelota pasó por encima del horizontal, mientras Jafeth, en el banquillo, pensaba que debía ir ganando 2-0.
La tercera fue al 43’, con un remate de Juan Diego Monge que Pemberton desvió en forma espectacular con su mano izquierda, ratificando su buena actuación, empero la pelota le quedó a Luis Pérez, quien la “cuchareó” muy suave y Palma logró salvarla en la línea. Definitivamente les faltó “cuchara” a estos guerreros.
En la complementaria el partido no varió mucho. La Liga, con un buen trabajo de Juan Gabriel Guzmán y luego el ingreso de Kenneth García, buscaba su opción apostando sobre todo a la bola muerta, ante su dificultad de coordinación cuando se acercaban al marco pezetero.
No obstante, la acción del gol, al 77, fue una muy buena jugada; una bola que recupera Sancho en las puertas del área, hace un sombrero y se la pone a Sánchez, quien a pura izquierda; dos toquecitos, sombrero a Robert Arias, y remate potente al ángulo derecho de Adrián de Lemos, le puso números definitivos al partido.
Después de eso, la Liga se echó a defender la anotación y Pérez solo tuvo una oportunidad más en bola muerta, cobra Ariel Rodríguez, Francisco Calvo se adelanta, sorprende a la defensa visitante, pero le queda en la de ‘palo’ y su disparo va suave a las manos de Pemberton.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net