Una vida más larga
Candilejas candilejas.cultura@gmail.com | Viernes 05 agosto, 2016
Katia, joven estudiante, se reúne actualmente con otras personas para crear una especie de comedor en el que puedan alimentar y proveer de alguna ropa a personas en pobreza extrema o que mendigan en las calles. Los que no han tenido posibilidad de estudiar, trabajar y tener una vida digna.
Para lograr su propósito, Katia y su grupo buscan el apoyo económico de otras personas altruistas como ellos, dispuestas a unirse al proyecto.
No es un caso común. La mayoría de personas tiende a preocuparse por sí mismas pero no tanto por los demás. “La ética protestante, relacionada con la ideología del modelo capitalista, ha hecho que las sociedades tengan una tendencia hacia la individualidad. Y no es un fenómeno únicamente de Costa Rica”, explica el sociólogo Adrián Portuguéz.
Sin embargo, parece que las personas que voluntariamente sienten el impulso de ayudar a otros, tienen una vida más larga que quienes no lo hacen.
Lo anterior según los resultados de una investigación de la Universidad de Michigan (UM), publicada en Internet en la revista Health Psychology, en la que Sara Konrath, autora principal del estudio y psicóloga de la UM, explicó que “las personas se ofrecen como voluntarias por una amplia gama de razones, desde salirse de su casa y conocer más gente, hasta hacer algo bueno por quienes necesitan ayuda y grupos que las apoyan”.
La conclusión de este estudio, es que preocuparse y ocuparse por el prójimo ayuda a desactivar las respuestas al estrés y activar ciertas hormonas como la oxitocina, que restauran la función fisiológica. “Se amortigua el estrés de la persona que brinda cuidado a otros y se promueve su bienestar”.
“El altruismo basado en conciencia, conocimiento y cercanía afectiva, le da un sentido trascendental a la vida”, dice la psicóloga Carmen Carrasco.
“Podemos decir que, al menos desde mi práctica profesional, en un principio un altruista puede hacerlo por intereses propios, pero se produce luego una transformación porque esa labor lo va acercando al conocimiento de historias y circunstancias de vida, al sufrimiento, a las esperanzas, a ver cómo se puede sortear una gran dificultad y todo esto hace que el altruismo adquiera su verdadero sentido” explica Carrasco.
El sitio Internet Thecoffeephilosophy en su artículo “How helping others is good for you” y la Fundación para la Salud Mental (organización británica sin ánimo de lucro fundada en 1949) coinciden en que ayudar a los demás aporta beneficios en el ámbito de la salud mental. Promueve cambios fisiológicos en el cerebro asociados a la felicidad.
¿Han sido y son los costarricenses altruistas? ¿En qué medida?
“Creo que el altruismo es parte del ser costarricense desde la colonia. Eran épocas en las que si alguien iba a construir una casa, la familia y la comunidad le ayudaban de modo desinteresado” explica el historiador Vladimir de la Cruz.
“Había también un altruismo institucionalizado. Desde el Gobierno se impulsaron acciones para mejorar las condiciones de la gente, como por ejemplo las medidas tomadas para la educación de niñas y niños, en 1824 y 1832. Eran medidas de carácter altruista que se hacían pensando desde el Estado en el bien de la gente” dice el historiador.
En época de Braulio Carrillo, Jefe de Estado de Costa Rica durante dos períodos, (1835 a 1842), se impulsaron medidas para mejorar la condición de las viviendas.
Para Vladimir de la Cruz, en políticas públicas se mantiene esa conducta altruista, pero las personas a nivel individual se han vuelto menos altruistas.
“Es un problema de educación de valores, no se educa en ese sentimiento de generosidad. Ahora la educación busca exaltar más al individuo sin importar mucho lo que pase con los demás” concluye.
Por eso, cabe la pregunta: ¿es un retornar a ciertos valores la iniciativa actual de Katia y sus amigas y amigos, que mencionamos al inicio? ¿Podría haber un relevo generacional más inclinado hacia el altruismo y beneficiándose con él?
Carmen Juncos y Ricardo Sossa
Editores jefes y Directores de proyectos
Fuentes: www.excelsior.com.mx