Ambientalistas preocupados por permiso de instalar piñera en Humedal de Térraba Sierpe

El permiso para el establecimiento del proyecto de la Hacienda doña Victoria, con 600 hectáreas desde Palmar Sur hasta Olla Cero, en el Humedal de Térraba Sierpe, causó molestar dentro del sector ambientalista.

Esto porque el humedal es un área silvestre protegida y declarada sitio Ramsar desde 1995.

Además, forma parte del paisaje cultural Delta del Diquis, sitio patrimonio mundial con importante valor arqueológico.

Instalar una piñera en este sitio podría ser contraproducente para la conservación del ecosistema, es por ello que presentaron un recurso de apelación a la Secretaría Técnica Ambiental (Setena), que otorgó el permiso para el proyecto.

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“No hay claridad de que, para este proceso, la institucionalidad del Ministerio de Salud y de Agricultura hayan sido tomadas en cuenta para los procesos de monitoreo y control del uso de plaguicidas en estas zonas de alta vulnerabilidad”, dice un manifiesto emitido por la Alianza Nacional para la Defensa del Agua, Frente Nacional por la Protección de los Humedales y de la Red Centroamericana de Acción del Agua, en contra de la resolución.

“La resolución viola el principio de legalidad y de debido proceso (...), asimismo, el principio precautorio de pleno reconocimiento en nuestra legislación y jurisprudencia ambiental”, agrega.

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Setena habría reconocido no tener los criterios técnicos suficientes para determinar si lo procedente es iniciar un proceso de lesividad o sanear el acto en cuestión, reconociendo que algunas instituciones se encuentran pendientes de emitir su criterio sobre aspectos medulares en el otorgamiento del permiso.

Las organizaciones ambientales mencionadas además solicitaron a Carlos Manuel Rodríguez, ministro de Ambiente y Energía, que “en apego a la tradición de la política ambiental nacional de respeto y protección de nuestros recursos naturales, declare con lugar el recurso de apelación planteado.”

Entre las instituciones que conforman las redes firmantes del manifiesto también se encuentran la Fundación Neotrópica y la la Unidad de Gestión Ambiental de la Vicerrectoría de Acción Social de la Universidad de Costa Rica, entre otras.