Chocolate, aliado del sexo
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 21 julio, 2011
Chocolate, aliado del sexo
Nuevos productos a base de esta dulce delicia lo convierten en complemento ideal de las relaciones sexuales. Pero, ¿por qué está tan ligado al placer?
Desde su descubrimiento en el Nuevo Mundo, todos se han rendido al cacao.
El emperador azteca Moctezuma lo tomaba por sus valores afrodisiacos, y ya en nuestros días, la actriz Catherine Zeta-Jones aseguraba que lo único mejor que el sexo era el sexo con chocolate.
Un estudio reciente realizado en Reino Unido aseguraba que más de la mitad de las mujeres de ese país, el 52%, prefería el chocolate al sexo, aunque la tasa era más baja en el caso de los hombres.
Y es que es un secreto a voces que las mujeres son sensibles a este placer, algo que quedó documentado en una investigación que descubrió que el chocolate estimula distintamente determinadas áreas de cerebro según el sexo. La conclusión: son las mujeres las que disfrutan más comiéndolo.
“Las asociaciones con el sexo que produce el chocolate está en sus componentes”, explica Sara Pérez, terapeuta naturista y fundadora de Los Placeres de Lola, la única tienda erótica en España de corte feminista, que tiene en el chocolate uno de sus mejores aliados.
“El chocolate contiene teobromina, un alcaloide de la misma familia que la cafeína, y que produce un efecto similar; también lleva triptófano, un aminoácido que estimula la generación de serotonina, que es la hormona responsable de la sensación del bienestar”, explica Pérez.
“Por eso el chocolate es un auténtico ‘quitapenas’, hace sentir bien. Calma la ansiedad, de ahí que esté indicado para tratar depresiones y estados de ansiedad”.
Además es un reconstituyente, da energía y abre el apetito y también está indicado para casos de anemia. Y el apetito del chocolate para combatir el síndrome premenstrual se debe al contenido en magnesio, cuenta la experta.
Pero además, el cacao contiene anandamina, que activa los mismos receptores cerebrales que se ponen en funcionamiento por la marihuana, sensibilizando los neurorreceptores. De ahí que haya una cierta verdad en que el chocolate sea adictivo.
Y a todo ello se suma la feniletilamina (FEA), semejante a las anfetaminas, lo que produce efectos estimulantes, una sustancia que segrega el cuerpo de forma natural en estados relacionados con el enamoramiento y el disfrute y el placer.
“El chocolate provoca además una vasodilatación similar a la de los alimentos afrodisiacos, que provocan estimulación sensorial, nerviosa y cardiovascular”. “La cáscara de cacao, en forma de infusión, prolonga la erección y la duración de las relaciones sexuales, además de subir el ánimo”, dijo la experta.
Y los efectos son más fuertes cuanto más puro sea el cacao.
En Los Placeres de Lola, aprovechan las propiedades del chocolate más que como sustitutivo, como acompañante del sexo.
“Tenemos productos con aroma de chocolate. Sin embargo, aquí el chocolate no funciona a nivel físico, sino cerebral, porque su olor transporta al recuerdo de lo que provoca el chocolate y predispone al placer”, explica Pérez.
Los productos van desde la pintura de chocolate comestible, para jugar dibujando en la piel, hasta aceite de chocolate, pasando por cremas o velas que al consumirse se transforman en aceite de masaje. También hay lubricantes de chocolate, ropa interior comestible e incluso vibradores que pueden acompañarse de un helado de chocolate.
La marca chocolatera Theobroma Cacao tiene además una de las líneas eróticas más completas, con productos como zapatos de tacón, uno de los fetiches por excelencia, torsos, pechos o penes a base de chocolate venezolano.
Pero más allá de los productos, la experta utiliza las propiedades del chocolate en sus talleres sobre sexo, concretamente desde la cocina y desde los masajes.
“Nada mejor que explotar las propiedades del cacao en una cena romántica. Por ejemplo, espolvoreándolo con jengibre en una ensalada o en una sopa fría de zanahoria, naranja y chocolate, coronado con un postre ligerito, como fresas con chocolate”.
Y como colofón: un buen masaje con crema o aceite de chocolate, que además tiene propiedades positivas para la salud de la piel: “es exfoliante, nutritivo y antioxidante”.
Madrid/ DPA
Nuevos productos a base de esta dulce delicia lo convierten en complemento ideal de las relaciones sexuales. Pero, ¿por qué está tan ligado al placer?
Desde su descubrimiento en el Nuevo Mundo, todos se han rendido al cacao.
El emperador azteca Moctezuma lo tomaba por sus valores afrodisiacos, y ya en nuestros días, la actriz Catherine Zeta-Jones aseguraba que lo único mejor que el sexo era el sexo con chocolate.
Un estudio reciente realizado en Reino Unido aseguraba que más de la mitad de las mujeres de ese país, el 52%, prefería el chocolate al sexo, aunque la tasa era más baja en el caso de los hombres.
Y es que es un secreto a voces que las mujeres son sensibles a este placer, algo que quedó documentado en una investigación que descubrió que el chocolate estimula distintamente determinadas áreas de cerebro según el sexo. La conclusión: son las mujeres las que disfrutan más comiéndolo.
“Las asociaciones con el sexo que produce el chocolate está en sus componentes”, explica Sara Pérez, terapeuta naturista y fundadora de Los Placeres de Lola, la única tienda erótica en España de corte feminista, que tiene en el chocolate uno de sus mejores aliados.
“El chocolate contiene teobromina, un alcaloide de la misma familia que la cafeína, y que produce un efecto similar; también lleva triptófano, un aminoácido que estimula la generación de serotonina, que es la hormona responsable de la sensación del bienestar”, explica Pérez.
“Por eso el chocolate es un auténtico ‘quitapenas’, hace sentir bien. Calma la ansiedad, de ahí que esté indicado para tratar depresiones y estados de ansiedad”.
Además es un reconstituyente, da energía y abre el apetito y también está indicado para casos de anemia. Y el apetito del chocolate para combatir el síndrome premenstrual se debe al contenido en magnesio, cuenta la experta.
Pero además, el cacao contiene anandamina, que activa los mismos receptores cerebrales que se ponen en funcionamiento por la marihuana, sensibilizando los neurorreceptores. De ahí que haya una cierta verdad en que el chocolate sea adictivo.
Y a todo ello se suma la feniletilamina (FEA), semejante a las anfetaminas, lo que produce efectos estimulantes, una sustancia que segrega el cuerpo de forma natural en estados relacionados con el enamoramiento y el disfrute y el placer.
“El chocolate provoca además una vasodilatación similar a la de los alimentos afrodisiacos, que provocan estimulación sensorial, nerviosa y cardiovascular”. “La cáscara de cacao, en forma de infusión, prolonga la erección y la duración de las relaciones sexuales, además de subir el ánimo”, dijo la experta.
Y los efectos son más fuertes cuanto más puro sea el cacao.
En Los Placeres de Lola, aprovechan las propiedades del chocolate más que como sustitutivo, como acompañante del sexo.
“Tenemos productos con aroma de chocolate. Sin embargo, aquí el chocolate no funciona a nivel físico, sino cerebral, porque su olor transporta al recuerdo de lo que provoca el chocolate y predispone al placer”, explica Pérez.
Los productos van desde la pintura de chocolate comestible, para jugar dibujando en la piel, hasta aceite de chocolate, pasando por cremas o velas que al consumirse se transforman en aceite de masaje. También hay lubricantes de chocolate, ropa interior comestible e incluso vibradores que pueden acompañarse de un helado de chocolate.
La marca chocolatera Theobroma Cacao tiene además una de las líneas eróticas más completas, con productos como zapatos de tacón, uno de los fetiches por excelencia, torsos, pechos o penes a base de chocolate venezolano.
Pero más allá de los productos, la experta utiliza las propiedades del chocolate en sus talleres sobre sexo, concretamente desde la cocina y desde los masajes.
“Nada mejor que explotar las propiedades del cacao en una cena romántica. Por ejemplo, espolvoreándolo con jengibre en una ensalada o en una sopa fría de zanahoria, naranja y chocolate, coronado con un postre ligerito, como fresas con chocolate”.
Y como colofón: un buen masaje con crema o aceite de chocolate, que además tiene propiedades positivas para la salud de la piel: “es exfoliante, nutritivo y antioxidante”.
Madrid/ DPA