Coopesa vuela alto

Cooperativa de Servicios Aeroindustriales (Coopesa), dedicada a la reparación y el mantenimiento de aeronaves en el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, empezó la construcción de hangares capaces de atender 12 aeronaves simultáneamente. El objetivo de la cooperativa es duplicar la capacidad de sus actuales instalaciones.

El nuevo hangar proyecta también la contratación de 400 mecánicos, de los cuáles 30 serán jóvenes en riesgo social capacitados por la Universidad Fundepos y Coopesa a través del programa Empléate, del Ministerio de Trabajo.

En total, Coopesa invertirá $63 millones en las nuevas instalaciones, que se espera estén terminadas para inicios de 2022.

Estas además incluyen un pozo que también permitirá dotar de agua potable a la comunidad de El Coco de Alajuela.

Los hangares servirán para convertir aviones de pasajeros en cargueros y poder albergar los aviones más grandes de la industria.

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Coopesa podrá transformar aviones de pasajeros del modelo 737-800 de Boeing, gracias a un convenio oficializado con la empresa estadounidense la semana anterior.

El Boeing 737-800 es un modelo de pasajeros que desde 2016 se convierte a carguero a través de varias modificaciones, que asumirá Copesa para todo el continente americano.

Las modificaciones en la estructura del avión 737-800 incluyen la instalación de una gran puerta de carga, un refuerzo de las estructuras del avión y la instalación de una mampara para la protección de la tripulación, entre otras modificaciones de importancia.

Esta asociación con Boeing representa en su primera fase la prestación de servicios durante cinco años, a cuatro aviones anuales, con posibilidades de incremento para más aviones conforme a la demanda. Se pronostica un fuerte aumento de la demanda de aviones cargueros de este modelo de avión.

“Este proyecto marca un hito para el país, no solo porque duplicamos nuestra capacidad para reparar aviones en Costa Rica, sino porque seremos la estación convertidora de aviones de Boeing para América”, dijo Ennio Rodríguez, gerente general de Coopesa.

Es también un impulso para el turismo, pues más aerolíneas podrán operar con la tranquilidad de tener una estación reparadora de primer orden en el aeropuerto Juan Santamaría.

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Actualmente, la cooperativa paga mensualmente un canon de alquiler por instalaciones para aportar al Gobierno un mayor ingreso y que con el traslado en dos años a los nuevos hangares se triplicará.

En la alianza público-privada Coopesa proporcionó casi 10 hectáreas de terreno y cedió al Gobierno lo necesario para la calle de acceso.

Coopesa demuestra que las cooperativas pueden competir en mercados mundiales altamente competitivos, logrando así resolver no solo el desafío de la eficiencia, sino que, simultáneamente promueve la distribución de la riqueza pues los trabajadores son los dueños de esta cooperativa de autogestión.

“Para que el progreso económico y social sea cada día más robusto, la única manera de hacerlo es des- atando los nudos que nos permitan sacar adelante obras como estas”, comentó por su parte Marvin Rodríguez, segundo vicepresidente de la República.