¿Qué es la megarexia? Conozca el trastorno de personas con sobrepeso que se ven “sanos”

Ser un “gordito feliz” y aceptar su condición física o estado de salud como bueno, es la principal característica del megaréxico, que a pesar de sufrir obesidad, se percibe como sano, y esto puede derivar en enfermedades como la diabetes, hipertensión y problemas cardiovasculares.

El 85% de las personas obesas en el mundo sufren de este trastorno de conducta, y por cada anoréxico que se tiene registrado, hay por lo menos diez megaréxicos, según un estudio realizado por la Asociación Psiquiátrica Americana.

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En ocasiones suele confundirse como gran confianza en sí mismo o una aparente falta de interés por el aspecto físico o simple despreocupación por los kilos de más o el estado físico, pero hay repercusiones negativas a la salud.

“Esta es una situación compleja de comprender, sabiendo que la obesidad es un tema de mucho cuidado y que requiere atención interdisciplinaria, además requiere consciencia hacia el impacto en la salud que pueden generar nuestras acciones”, explicó Nicolás Zúñiga, licenciado en educación física, bachillerato en nutrición y entrenador personal de Multispa.

“Las personas que sufren de megarexia no tienen consideración o una conducta consciente de la alimentación, se ven normales, entre comillas y por lo tanto tienen una alimentación híper calórica y poco consiente, no consideran que sea una conducta de riesgo”, agregó.

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Y no es tanto que se vean delgados, sino que no les importa ser gordos porque se ven bien, aunque debajo de esto suele haber una negación, afirma Marina Díaz, Jefa de la Unidad de Trastornos Alimentarios del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

La obesidad es uno de los grandes problemas de la sociedad occidental y, lejos de ir a menos, parece que cada vez es más preocupante. Tanto es así que, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura en 2018, Costa Rica se ubica como el quinto país de Latinoamérica con más porcentaje de adultos obesos, con casi un millón de habitantes con obesidad, y donde tres de cada diez niños menores de 12 años igualmente sufren de obesidad infantil.

“Lamentablemente viene una corriente que aumenta la conducta sobre ‘soy gordo y qué’, y ese es el orgullo a ser gordo. Es una aceptación hacia la obesidad cada vez más común, quizás en diez años esta corriente aumente y deben entender que la obesidad no es ser gordo, se valora clínicamente por nutricionistas y médicos y promotores de la salud. Se da un aumento de tejido graso y pérdida de masa muscular (Obesidad sarcopénica) y esto conlleva por lo general a varios factores de riesgo asociados al exceso de peso por aumento en tejido graso y una estrecha relación con una serie de enfermedades de alta mortalidad prematura”, aclaró Zúñiga de Multispa.

Su recomendación es realizar actividad física sin exceso, tener una rutina amigable de 40 minutos a una hora para tener un impacto positivo.

“No se trata de buscar los cuadritos o glúteos más grandes, sino de una composición saludable y cualidades físicas óptimas para la calidad de vida. Ningún obeso puede decir que está bien. Lo que se ocupa es un poco de actividad física, es moverse para generar gasto calórico e ir poco a poco agarrándole el gusto”, concluyó.