Stephanie Campos: “El país ha bajado vertiginosamente su tasa de natalidad”
Jeffry Garza jeffrygarza.asesor@larepublica.net | Viernes 26 enero, 2018
Stephanie Campos, candidata presidencial del partido Renovación Costarricense, salió en defensa de su propuesta de fomentar la natalidad para salvaguardar el régimen de pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte, como medida a largo plazo.
La candidata argumentó que es necesario fomentar políticas de natalidad, similares a las de países europeos como España y Dinamarca, con el fin de enfrentar el envejecimiento de la población, basado fundamentalmente en una mayor esperanza de vida.
“Existe un claro descenso en la tasa de reposición de la población. En 30 años el país ha bajado vertiginosamente su tasa de natalidad”, expresó Campos.
Lea más: Mujeres costarricenses tienen cada vez menos hijos
El país tiene una tasa de reemplazo de 1,7 hijos por mujer de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Inec). Este promedio es menor al de países desarrollados, que es de poco más de dos hijos por mujer.
La tasa de reemplazo se refiere a la fecundidad mínima necesaria para que una población -excluyendo las migraciones- se mantenga indefinidamente en el tiempo sin disminuir su volumen.
“Esto repercute en el desgaste del “bono demográfico”, implicando que el país en 20 años o menos no contará con la suficiente cantidad de población en edad productiva, para sostener el estado de bienestar social”, explicó la candidata.
“Cada vez más el país invierte la pirámide poblacional hacia una mayor cantidad de personas envejecidas”, agregó.
La esperanza de vida en Costa Rica ha aumentado en un año del 2006 al 2016, al pasar de 79 a 80 años, mientras que la tasa natalidad ha caído 2,4 puntos porcentuales en ese periodo, también señala Inec.
La combinación de estos dos fenómenos provoca precisamente lo que explica Campos.
En relación a las políticas europeas, tanto en España y Dinamarca, los países que utiliza Campos como ejemplo, éstas se centraron en campañas publicitarias para promover la fecundidad. En el caso de Italia, que en 2015 registró la tasa de fecundidad más baja de la Unión Europea, los incentivos vinieron de otros actores sociales además del gobierno.
Al pedir que precisara sobre las políticas que impulsaría en nuestro país, Campos no habló de incentivos económicos pero sí de paternidad responsable y compartida, fortalecer las redes de cuido y garantizar un acceso oportuno a la salud reproductiva.
A corto plazo, su propuesta es fortalecer la sostenibilidad del régimen de pensiones, promoviendo que el 43,2% de la fuerza laboral que opera informalmente se incorpore a la formalidad, la reducción de gastos administrativos y el ajuste de las cuotas para que estas se aproximen a lo cotizado por cada persona.